Argentina y Brasil registrán los más altos niveles de homicidios de menores cometidos por las fuerzas de seguridad

Preocupan los reiterados casos de abuso sexual y maltrato a niños

Según Unicef, las agresiones a los chicos también son generadas por personas de su entorno cercano

Los casos de abuso sexual y de maltrato en los institutos de menores o en las comisarías donde hay niños ilegalmente encerrados son las formas de violencia contra la infancia más repetidas en Argentina, de acuerdo con un informe de la sede argentina del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

De acuerdo con ese estudio, las situaciones de violencia que más afectan a los niños latinoamericanos están relacionadas al maltrato y el descuido por parte de sus padres o adultos a cargo. También figuran la violencia juvenil urbana y la explotación laboral y sexual de los menores de edad, un flagelo que según los especialistas crece a la par de la pobreza.

El análisis se difundió ayer en el marco del debate de expertos y funcionarios de países de América latina que asisten en Buenos Aires a una Consulta Regional sobre Violencia contra los Menores de Edad que es coordinado por las Naciones Unidas (ONU).

La consulta de la ONU abarca a todas las naciones, que en estos últimos meses dieron cuenta de las situaciones de violencia por las que atraviesan sus niños, ya sea a nivel doméstico o institucional.

El capítulo latinoamericano del informe, cuya elaboración se lleva a cabo en Buenos Aires desde ayer y hasta el 1º de junio, se basará en un documento elaborado por la Universidad del Valle de Colombia, que recabó la información disponible en los 19 países de la región.

Preocupa también el maltrato policial y el "gatillo fácil", sobre todo en Argentina y Brasil, donde según el coordinador del estudio, Paulo Sergio Pinheiro, se registran las tasas más altas de homicidios violentos de jóvenes cometidos por las fuerzas de seguridad.

"Las nuevas democracias no reformaron los aparatos policiales que continúan ejerciendo el mismo control social ilegal que tenían durante las dictaduras militares", dijo Pinheiro, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad Brown de Estados Unidos y designado por el secretario general de la ONU, Kofi Annan, como experto independiente sobre violencia contra los menores de edad.

"La cultura de la vigilancia está muy presente en América del Sur", continuó. Dijo que la demonización de los niños y los jóvenes y las propuestas de penas de muerte son frecuentes en países de la región.

Por su parte, Jorge Rivera Pizarro, representante de Unicef en Argentina, también apuntó a otras problemáticas excluyentes de los chicos en el país: el abuso sexual y el encierro de niños pobres en institutos de menores o detenidos ilegalmente en comisarías.

"Muchos niños argentinos están sometidos a situaciones de violencia intrafamiliar o abusos sexuales que, en la mayoría de los casos, comete gente de su entorno más cercano", destacó Rivera.

En cuanto a la pobreza y el maltrato institucional, afirmó que "los niños que deambulan por las calles, dejan la escuela y trabajan (por ejemplo, en la recolección de cartones) para redondear la canasta familiar, están expuestos a situaciones de violencia a diario y muchos terminan detenidos en una comisaría".

Para Rivera Pizarro, el Estado actúa en forma violenta contra los niños cuando los priva de su vida familiar, "no por orden penal, sino por falta de recursos económicos y la ausencia de una política social efectiva que apoye a sus familias". (Télam)

El especialista Pinheiro.