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 jueves, 26 de mayo de 2005  
La gente invadió los espacios verdes en el feriado del 25 de Mayo
Salió a distenderse, pasear, comer locro y empanadas. Sin embargo las escarapelas brillaron por su ausencia

Gente, mucha gente en todos y cada uno de los paseos públicos de la ciudad; más aún en los espacios verdes. Los rosarinos salieron a desenchufarse durante el feriado de ayer en el que disfrutaron del ocio sin darle importancia a la fecha. Cumplieron con el rito de escuchar folclore y comer locro, pero impulsados por la fuerza de la costumbre. Las banderas y las escarapelas se vieron poco y nada; para el público, daba la mismo si era 20 de Junio, Viernes Santo, 17 de Agosto o 25 de Mayo.

Sin embargo, ayer se conmemoró el 195ºaniversario de la Revolución de Mayo. "Ese fue el día en el que los criollos empezaron a diferenciarse de los españoles", explicó Georgina, que asiste al 9ºaño de la EGB. Como sus padres y sus hermanos llevaba una escarapela, pero sólo porque se las habían dado en el shopping donde se encontraron con La Capital.

En efecto, entre las diversas actividades que ayer hubo en la ciudad, Portal Rosario organizó en su patio de comidas el recital de Facundo Saravia y un desfile de bandas militares. "Vinimos para disfrutar de una alternativa más de este feriado", dijo Oscar, uno de los cientos de asistentes al show del hijo de uno de Los Chalchaleros y ex integrantes del conjunto folclórico.

Las inmediaciones del centro comercial estaban copadas por el público. En el parque Alem, los chicos disfrutaban al rayo del sol en una jornada primaveral en pleno otoño. Los automóviles iban a paso de hombre y hubo embotellamientos que los conductores tomaron con buen humor, algo absolutamente comprensible en un día sin obligaciones que cumplir.

Una multitud participó también de los festejos en el anfiteatro Humberto De Nito. Las actividades comenzaron a las 16 con la presentación de destacados artistas populares. El espectáculo contó con la colaboración del Centro de ex Soldados Combatientes en Malvinas de Rosario, quienes repartieron escarapelas e invitaron a la gente con mate cocido. A lo largo de la tarde, se presentaron el dúo Coplanacu, el armoniquista Franco Luciani y el pianista Gerardo Bautista, todos ovacionados por el público que los esperaba ansiosamente.

Satisfechos con la convocatoria, tanto el intendente Miguel Lifschitz como la secretaria de Cultura, Marina Naranjo, resaltaron la importancia de este tipo de eventos para que la ciudadanía pueda hacer uso de los espacios públicos de la ciudad.

"Desde la Municipalidad queremos propiciar que la gente haga una utilización plena de este tipo de sitios y que la calle vuelva a ser de los ciudadanos", señaló Naranjo. Por su parte, Lifschitz adelantó que estos acontecimientos populares se repetirán en las próximas fechas patrias, como el 20 de Junio. "Pensamos realizar en la ex Sociedad Rural un espectáculo de doma y folclore que contará con la participación del Chaqueño Palavecino, para que lo puedan disfrutar todos los rosarinos", señaló el mandatario municipal.

Apenas el ritmo folclórico comenzó a levantar sus acordes, el público hizo lo propio con el baile. Improvisó chacareras y zambas. Un halo bien criollo pareció invadir el ambiente.

No obstante, esto fue sólo una parte de lo que se vivió ayer. "No hubo espíritu patriótico", dijeron muchos de los consultados por este diario. "A la mañana abrieron todos los negocios del centro y nadie se puso la escarapela", se quejó una mujer en el anfiteatro.

Los parques Urquiza, nacional a la Bandera y las ferias de artesanías, ropa y objetos antiguos se poblaron como nunca. Sin embargo, los vendedores aclararon que "la gente no compró, sino que la mayoría vino sólo a pasear". En tanto, el parque Regional Sur fue escenario de un festival de baile, música y destrezas criollas.

Las rotiserías y casas de comidas estuvieron de parabienes. Expusieron en sus frentes los típicos carteles: "Hoy locro y empanadas". Y se cansaron de despachar ollas con el guiso típico que la gente optó por saborear en familia.
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Jinetes en su salsa. El parque Regional Sue convocó a los fanáticos de la destreza criolla.


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