Y La Rosca, ¿dónde está?

Hace seis meses que La Rosca no está, a pesar de que el mismísimo director de Radio Universidad se comprometió por este medio y atento a una Carta de Lectores que se quejaba porque el programa ya no estaba en el aire. Contento y tranquilo, esperé, esperé, pasaron enero, febrero, marzo, abril y en mayo llamé a la emisora para saber por qué no se emitía el programa. Luego de muchas idas y vueltas, alguien se dignó a responder que ya no estaba más por problemas comerciales de sus hacedores, es decir, porque no tenían el dinero para pagar el espacio. Absorto, mi indignación fue creciendo cuando lo comenté con otros simpatizantes de La Rosca y me confirmaron lo sucedido: Radio Universidad y sus directivos decidieron levantar uno de los mejores programas de Rosario porque sus creadores no tenían la plata para pagar un espacio que nos corresponde a todos. Me pregunto, cuáles son los valores artísticos y estéticos que valoran estos directivos. Cuáles son las necesidades económicas de una radio que es de los estudiantes y cómo priorizan qué programas emiten y cuáles no. ¿Es por lo que pagan? Es increíble cómo el espacio público se convierte en privativo. Me gustaría saber si el compromiso escrito de ese director a través de una carta es el mismo compromiso que mantiene frente a sus espectadores. Me gustaría también que La Rosca esté en el aire, como todos los sábados desde hace dos años, para disfrutar de sus increíbles producciones y sus excelentes críticas periodísticas.

Jorge Luis Trejo