Desprotegidos

"El tema de calle Maipú es muy complejo. Estamos desalentados porque las veces que hicimos reclamos no tuvimos eco. Cuando fue el asesinato de Sergio Moliné (el 8 de febrero de 2001), nos reunimos con el jefe de policía y con Angel Baltuzzi -que era ministro de Gobierno- y por unos meses se aplacó un poco, pero ahora ya no sabemos qué puerta golpear". Con desesperanza en la voz, Sergio Obuljen, síndico de la Asociación de Joyerías, Relojerías y Afines sintetizó la opinión de sus 90 asociados y 60 comercios adheridos. "La inseguridad es de toda la vida. Maipú está bastante desprotegida y los riesgos potenciales de los locales son superiores a los de la zona bancaria. Acá es como si los billetes estuvieran en la vidriera", contó. "Estamos desalentados. Ya no sabemos con quien hablar. Cuando vamos a la seccional 1ª (con jurisdicción en la zona) nos dicen que no tienen recursos y que tienen que cuidar a los presos. Después terminamos en lo de siempre. Es la inquietud de los primeros días y después vuelve todo a la normalidad".