Ecos de los sucesos de la semana pasada entre Sao Paulo y Quilmes

A Pelé lo inquieta el clima del choque Argentina-Brasil

El ex astro del fútbol Edson Arantes do Nascimento, Pelé, cree que el partido que jugarán en junio Argentina y Brasil por las eliminatorias sudamericanas para el Mundial del 2006 podría ser muy complicado después del incidente ocurrido la semana pasada en la Copa Libertadores de América. Tras el partido entre Sao Paulo y Quilmes, el defensor argentino Leandro Desábato estuvo encarcelado 40 horas luego de ser acusado por el delantero Grafite de haberle proferido insultos racistas.

"Siempre hubo una gran rivalidad entre Brasil y Argentina, y uno puede imaginarse cómo será ahora", dijo ayer Pelé. El ex futbolista expresó así sus temores por lo que pueda pasar en el estadio Monumental, en una reedición del viejo clásico sudamericano.

"Obviamente no será un partido tranquilo. Los árbitros y la Fifa tendrán que tomar precauciones porque será un partido peligroso", agregó el ex jugador, de 64 años.

Pelé dijo que cuando era futbolista frecuentemente oyó insultos referidos al color negro de su piel. "Escuché todo tipo de cosas que no puedo repetir. Pero era algo que pasaba dentro de la cancha. No sé si deberíamos entenderlo como como racismo o provocación", explicó.

"Ganarle a Argentina como visitante después que me provocaran, me daba una alegría enorme", recordó. También expresó la idea de que quizá el incidente de Desábato fue bueno para poner al descubierto el tema de los insultos en el campo de juego. "Pero eso no va a parar. En el fragor de la lucha los jugadores seguirán diciendo cosas. Y yo recuerdo que incluso los futbolistas brasileños me insultaron", afirmó.