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 sábado, 05 de marzo de 2005  
Insólita movilización para repudiar el procesamiento del ex comisario
Empleados de la comuna de Rincón cesaron tareas para apoyar a Facino
Ocurrió en febrero, cuando se concentraron frente al Juzgado Federal de Santa Fe. Buscan a un testigo clave

Una treintena de empleados de la comuna de San José del Rincón abandonaron sus tareas el 15 de febrero pasado y se trasladaron hasta el Juzgado Federal de Santa Fe. Lo hicieron en señal de apoyo al jefe comunal y ex comisario Mario Facino, detenido y procesado junto a otras seis personas por asociación ilícita en el marco de la investigación de delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura militar en la capital provincial.

El hecho tomo estado público cuando uno de los integrantes de la comisión comunal, Luis García, pidió a sus pares informes al respecto. Los treinta empleados se trasladaron en siete Trafic desde Rincón (ubicada a unos seis kilómetros al norte de Santa Fe) hasta el Juzgado emplazado a sólo tres cuadras de la Gobernación.

Es más: la jornada fue declarada en la comuna como el "día de San Facino", dejándose de atender en las oficinas públicas. Al parecer, la respuesta formal es que se acordaron masivamente días compensatorios para justificar las faltas, aunque se ignora si todos los que se solidarizaron con el ex comisario lo hicieron de motu proprio o no tuvieron margen para negarse.

El 24 de marzo de 1998, frente a la comuna, una manifestación de Hijos y otros organismos defensores de los derechos humanos fue violentamente interrumpida por personas que salieron a defender a Facino, algunos de ellos a caballo. Según se recuerda, de la refriega participaron empleados comunales.

En tanto, el querellante José Pedraza confirmó que hace unos cinco meses presentó ante el juez federal Reinaldo Rodríguez un pedido para que se cite a declarar a Roberto Fermín de los Santos (médico generalista), considerado un testigo clave.

Sin embargo, De los Santos, de 53 años, reside actualmente en Radatilli (localidad cercana a Comodoro Rivadavia) y se niega a comparecer aduciendo "temer caer muerto" en caso de verse obligado a hacerlo. Tampoco se presentó cuando el magistrado le envió una junta médica para comprobar su estado físico y emocional.

De los Santos se presentó el 13 de noviembre de 1984 ante el entonces arzobispo de Neuquén, monseñor Jaime de Nevares, para ofrecerle detalles sobre el andamiaje represivo que existió en Santa Fe y su funcionamiento.

El testimonio fue recogido por la Conadep. De los Santos trabajó en villas de emergencia de la ciudad de Córdoba, donde lo contactaron integrantes de Montoneros para que se desempeñara como médico de la organización.

Fue designado jefe del servicio de sanidad de la organización en Córdoba, pero dos días después del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976 cayó detenido. Luego lo torturaron y llevaron al centro clandestino La Perla.

Los militares le ofrecieron a De los Santos infiltrarse en grupos de derechos humanos y, según su relato ante la Conadep, fue trasladado a Santa Fe en 1977. "Ordenaron que me presentara en el Destacamento de Inteligencia, cuyo jefe era el teniente coronel (Domingo Manuel) Marcellini, siendo su jefe de operaciones el capitán (Domingo) Morales", testimonió.

También afirmó que "las personas encargadas de la lucha antisubversiva, además de las anteriores, eran el capitán Alberto José Jaime, Julio César Domínguez, (Héctor Melitón) Martínez, el sargento retirado alias Nicolás, adscripto como personal civil, quien se encargaba de alquilar las casas operativas y tenía estrechas vinculaciones con los directivos de la Cervecería Santa Fe y el sargento retirado Hauque, alias Turco o Lolo", entre otros.

Mencionó, asimismo, al "oficial de la policía santafesina, adscripto al Destacamento de Inteligencia, alias Pollo (presunta referencia a Héctor Romeo Colombini)". Y comentó que actuaban tres civiles y tres sargentos ayudantes del Ejército, cuyos nombres desconoce.

De los Santos contó que tres casas funcionaban como centros de detención y tortura: una en Santa Fe, otra en Rincón y la tercera en Coronda. Ante De Nevares aseguró que podía identificar esas viviendas.
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Los empleados comunales celebraron el "Día de San Facino".

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