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 domingo, 13 de febrero de 2005  
Aluvión turístico

Un verdadero aluvión de turistas y viajeros colmó este verano la hotelería en Humahuaca, cabecera de la tierra quebradeña declarada Patrimonio Cultural de Humanidad el 2 de julio de 2003 por la Unesco. Geólogos, catedráticos universitarios, turistas, estudiantes, pueblerinos, agentes de turismo internacional agotaron las reservas hoteleras, por lo que los únicos sitios que quedan para pernoctar son espacios oficiales, campings y casas de familias.

El hecho de que la Unesco designara a todos los sitios de la Quebrada de Humahuaca como Patrimonio Cultural de la Humanidad, genera desde 2003 un inusual movimiento turístico que en su mayoría está integrado por jóvenes mochileros. Humahuaca, el epicentro quebradeño, está situada a 130 kilómetros al norte de la capital jujeña, con acceso directo por la ruta nacional 9 y a 2.939 metros de altura sobre el nivel del mar.

Sus calles son muy angostas, casi tres metros separan el frente de una vivienda del frente de la otra; algunas no tienen vereda y son empedradas.

Las casas son muy similares a las que construían los primeros habitantes de la zona, con puertas estrechas y ventanas pequeñas para contrarrestar los vientos arenosos.

Todo contrasta con el redescubrimiento de la naturaleza; Humahuaca, Uquía, Tilcara, Maimará, Purmamarca, Volcán y otros parajes quebradeños reflejan a simple vista la belleza del paisaje natural. Durante casi todo el año hay altas temperaturas y un cielo azul en toda la zona quebradeña.

Los cerros y las aguas chocolatadas del Río Grande son los símbolos que dan vida a esas comarcas.

En plena Humahuaca las elevadas cumbres son verdosas, y de norte a sur dirigiéndose a San Salvador las aguas atraviesan oleando las riberas y acariciando cerros multicolores como los de Maimará, conocido como "paleta de pintor"; otro tanto sucede en Purmamarca con el cerro Siete Colores, o el Colorado. Por todos estos sitios que ahora se redescubren por una gestión que llamó la atención internacional, alguna vez pasó el general Manuel Belgrano durante las luchas por la Independencia.

En la plaza central de ese bello paraje, para quienes visiten alguna peña en Humahuaca, se ofrecen menúes a $9 que incluyen dos empanadas o un tamal, locro o cazuelas y postre a elección, por persona.

También hay otra opción a $13 con locro y cazuela, mientras que como plato a elegir se puede optar por cada humita en chala a $2,50; estofado y cazuela de llama a $6; y milanesa de llama con guarnición a $6.
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