| domingo, 13 de febrero de 2005 | El fisco siempre aprieta un poco más En el 2004 se registró un ligero incremento en la presión provincial promedio de todo el país, producto de modificaciones (tanto subas como bajas) en el impuesto a los ingresos brutos de tres provincias. Desde el 2002 hasta el 2004, el Indice de Presión Fiscal Provincial (IPFP) verificó un aumento promedio del 2%, según el indicador conformado por el Ieral de la Fundación Mediterránea.
"Si bien resulta una magnitud pequeña, cabe destacar que fueron más las provincias que experimentaron subas que las que registraron bajas y, por su parte, la magnitud del incremento promedio resultó mayor que la magnitud del incremento promedio resultó mayor que la magnitud de la disminución promedio", señala el trabajo realizado por el instituto mediterráneo.
Por su parte, a nivel municipal también se registró una ligera suba en la presión promedio de los municipios seleccionados, acumulando desde el 2002 un incremento del cinco por ciento.
Al igual que en el período 2002-2003, continuaron siendo más las jurisdicciones que aumentaron la presión que las que la disminuyeron y, asimismo, mayor la magnitud de los aumentos que las disminuciones.
Entre el 2003 y 2004, la presión fiscal municipal promedio para todas actividades productivas experimentó un leve incremento, pasando del 0,58% al 0,59%.
El sube y baja En un extremo se encuentra el municipio de Formosa, el cual registró el mayor aumento de su presión fiscal sobre el promedio de la actividad productiva (creció 58%), seguida por Ezeiza (47%) y Tigre (45%). En el otro extremo, el municipio de Jujuy el que registró una mayor reducción de su presión fiscal (20%).
Sin embargo, "sólo un 26% de los aumentos verificados se debió a incrementos en las alícuotas, mientras que un 70% se explicó por modificaciones en los montos mínimos o fijos, situación que puede resultar más justificable en un intento de adecuarse a los incrementos en la facturación posiblemente registrados en los últimos años", explica el trabajo.
La situación se agrava si se considera que un 18% de los municipios no establece ningún servicio como contraprestación al pago de la tasa.
La evolución por grupo de actividades aumentó para todos los grupos siendo la intermediación financiera y comercio los más afectados (2,75% y 2,6%, respectivamente). Después actividades inmobiliarias (2,4%), servicios públicos (2,2%). El promedio de todas las actividades fue del 1,8%. En el caso de la industria y la construcción fue del 0,9%, actividades primarias 0,8% y enseñanza 0,1%. enviar nota por e-mail | | |