 | lunes, 08 de noviembre de 2004 | El superclásico fue de River River Plate superó por 2 a 0 a Boca Juniors en un superclásico que tuvo una desteñida producción futbolística de todos sus protagonistas y en el que apenas sobresalió la Gata Gastón Fernández, el jugador que le permitió a los de Núñez arañar otra vez la punta del Apertura.
Por contrapartida los boquenses quedaron a seis puntos de la cima (River está a dos del único puntero, Estudiantes), tratarán de salvar el año (aunque no sea así, es lo único que les queda) en la Copa Sudamericana y encima renunció su técnico, Miguel Brindisi.
El primer tiempo fue impresentable e indigno de un superclásico, ya que la pelota voló siempre por los aires y nadie tuvo intenciones ni capacidad para bajarla y jugarla.
Gallardo se mostró falto de ritmo, sin la velocidad necesaria para quebrar a sus rivales una vez que los superaba con su gambeta, al fin y al cabo lo único que parece quedarle de su época de volante desequilibrante y definidor.
Es que al Muñeco no le falta una quinta velocidad, sino que directamente no tiene cuarta, y entonces va por la cancha como los autos antiguos, a 60 ó 70, mientras el resto corre a más de cien. Y eso sin contar con la media docena de tiros libres que estrelló en la barrera. enviar nota por e-mail | | Fotos | | La Gata acaba de marcar el 1-0 y lo festeja con sus compañeros. | | |