| domingo, 05 de septiembre de 2004 | La última morada Luis Tapia, un albañil de 71 años, fue quien alquiló la habitación para Ramón Emilio Rodríguez el miércoles pasado, quien al día siguiente, en ese lugar, encontraría la muerte. Tapia contó que fue Norma Romero quien le pidió ver el cuarto. "Se mostró conforme y me dijo que era lo que necesitaba. Me informó que su compañero venía de Venado Tuerto al día siguiente", rememoró Tapia ante La Capital. Ese mismo miércoles a la tarde Norma y Rodríguez, al que Tapia describió como "un gordito de cabellos medio rubios y de unos 30 años" llegaron en taxi hasta la puerta de la vivienda. Ambos traían un bolso de viaje cada uno. "Fueron muy cordiales. Al muchacho le estreché la mano. El nunca me dijo su nombre", comentó Luis. "Estuvimos charlando un rato. Me contó que había perdido a su papá de muy chico y que del Chaco se fue a vivir a Venado Tuerto, donde trabajó hasta hace poco tiempo. También dijo que la pobreza lo había golpeado mucho", recordó Tapia. enviar nota por e-mail | | |