Travesía y Olivé

Hallan a un adolescente con un tiro en la cabeza

Uno de sus amigos dice que se suicidó. El arma, que había sido escondida, fue hallada a 14 cuadras del lugar del hecho

Dos muchachos cargando el cuerpo de un adolescente de 16 años con un tiro en la cabeza. Eso fue lo que vio la patrulla de la comisaría 10ª que llegó a Travesía y Olivé ayer a las 3.30. Los jovenes fueron demorados y el cuerpo fue remitido al Instituto Médico Legal para que se le realizara la autopsia de rigor. Uno de los compañeros de la víctima, quien quedó detenido y sería el único testigo del hecho, contó que cuando llegó el patrullero trataban de auxiliar al joven mortalmente herido. El adolescente se habría "pegado un tiro en la cabeza en un arranque de locura", les habría dicho a los policías de la 10ª. Tras las pesquisas se secuestró una pistola calibre GMC calibre 22 largo en un domicilio de Travesía al 1400 luego de haber desaparecido de la escena del incidente. Basados en que se trató de ocultar el arma, que fue encontrada a 14 cuadras del lugar donde se registró el hecho, los investigadores consideraban el caso como "muerte dudosa", sin descartar la hipótesis de homicidio, y esperaban conocer el resultado de la autopsia.

Fuentes de la pesquisa identificaron a la víctima como Carlos Alberto Ruiz, de 16 años, quien vivía en la villa Triángulo, uno de los asentamientos que se despliegan paralelos a la avenida de la Travesia hacia el oeste. Según confiaron las fuentes, la víctima habría llegado a una precaria vivienda ubicada en pasaje 37 -un pasillo paralelo a Travesía, ubicado al oeste de la avenida- donde estaban reunidos algunos de sus amigos. Ruiz vivía a una cuadra de la casa donde estaban las siete personas. El joven, bastante exaltado según habrían referido los testigos, le habría pedido al dueño de casa, un joven menor de 16 años apodado Chalo, que le devolviera un arma que poco tiempo antes le habría dado para que se la guardara. Luego de una pequeña discusión Chalo le entregó la 22 largo. Este joven fue imputado por la tenencia del arma de fuego en su domicilio.


Un disparo en la sien
Claudio Nicolás D., de 18 años y amigo de la víctima, salió de la casa y trató de convencer a Ruiz "de que no hiciera una locura con el fierro". Los dos jóvenes quedaron solos en el pasillo a 50 metros de Olivé charlando solos en la oscuridad. Según habría explicado el único testigo, Ruiz tenía problemas sentimentales con su novia y estaba atravesando un mal momento anímico. La charla concluyó cuando imprevistamente el adolescente colocó una bala en la recámara del 22 largo y se pegó un tiro en la sien izquierda, siempre según los dichos de Claudio Nicolás.

Con su amigo herido, según cuentan las fuentes, Claudio Nicolás cargó a Ruiz junto con otro menor que estaba en la casa y lo llevaron hacia Travesía para buscar auxilio. Después de hacer los 150 metros se toparon con el patrullero de la 10ª.

Al llegar al lugar donde el joven se habría efectuado el disparo mortal, los uniformados no encontraron el arma. Sólo hallaron un vaina servida de 22 largo tirada sobre la tierra al lado de un charco de sangre. Varias horas más tarde y tras tomar declaraciones a quienes estaban en el lugar, los investigadores lograron ubicar el arma en una casa de Travesía al 1400, en manos de un menor de 17 años.

El juez de Instrucción de la 13ª Barbero dispuso la detención de Claudio Nicolás D. en la seccional 10ª, a quien mañana le tomará la declaración indagatoria y aguarda recibir el resultado de la necropsia. El magistrado también ordenó que se le realicen las pericias dactilográficas al detenido.