Triunfo de Tiro Federal en Junín

Domingo Celsi / La Capital

Aunque el viaje a Junín no se pareció en nada a una excursión de fin de semana, la victoria tirolense permite suponer que si este equipo logra corregir algunos defectos, estará en condiciones de plantarse en cualquier cancha y de sumar los puntos necesarios para meterse en la pelea por los lugares más altos de la tabla.

En sus dos primeras presentaciones, los de Ludueña se habían mostrado muy sólidos en la tarea defensiva, pero ayer, contra todos los pronósticos y sobre todo si se toma en cuenta de que prácticamente salió ganando desde el vestuario con el gol de Rubén Ramírez, cometió el pecado de dejarle demasiada libertad a Sarmiento para que lo atacara sin cesar durante toda la primera parte.

Los de Rizzi le cascotearon el rancho un rato largo y encima lo acomodaron en dos minutos con dos cocazos de Zavaleta. Del 1-0 pasó al 1-2 y por momentos estuvieron muy cerca de estirar la diferencia. Pero cuando todos los hinchas verdes estaban en su momento más feliz, apareció otra vez Ramírez para empardar el duelo.

El empate inesperado pareció ser el disparador que Tiro necesitaba para convencerse de que podía volver con algo más que el puntito. Quedó claro que el Chaucha aprovechó el descanso para corregir errores y para inculcarle a sus muchachos que ser protagonistas era salir a buscar el partido y por suerte así lo hicieron. En el mismo inicio del complemento se notó que los Tigres iban a buscar el triunfo y de a poco fueron creando las situaciones necesarias para alcanzar el objetivo.

Así llegó el golazo de Bezombe con un tiro libre perfecto que se coló en el segundo palo de Campodónico y un rato después, Larrosa la robó en el medio y armó una contra letal con Romano, para que el recién ingresado Matías Saad estableciera una diferencia indescontable.

Desde allí hasta el final Sarmiento trató de achicar las cifras y estuvo a punto de conseguirlo, pero Tiro tuvo dos claras en los pies de Saad, que no pudo concretarlas, tal vez porque no quedó en buenas condiciones después de un duro choque con Zavaleta.

Por momentos Tiro la pasó mal, pero cuando entendió el juego salió a flote. Tuvo que hacer doscientos kilómetros para alcanzar su primer triunfo de la temporada y, más allá de que no deberá olvidarse de los errores del primer tiempo, tiene todo el derecho de festejarlo.

Matías Saad festeja el tanto que cerró la goleada tirolense.