Fuerte cruce de Arslanian y Blumberg

El ministro bonaerense dijo que la Nación subvenciona al empresario, quien refutó los dichos y sostuvo que lo difaman

El ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanian, acusó ayer al dirigente Juan Carlos Blumberg de evitar las críticas a la Casa Rosada por contar con financiamiento para su fundación y custodia especial de parte del gobierno nacional, y por eso centra sus cuestionamientos hacia la administración provincial. Pero el padre de Axel salió a desmentir que su organización tenga sostenimiento económico oficial y acusó al funcionario de la provincia de Buenos Aires de estar "difamándolo" con alguna "intencionalidad" que dijo desconocer.

"Creo que debe tener algún tipo de reparo" para criticar "debido a que él tiene protección policial de la Federal, de la Side y encima su Fundación está financiada por el gobierno nacional. En ese sentido, debe tener naturales escrúpulos, espero que los tenga", resaltó Arslanian en declaraciones a Radio Mitre, redoblando la fuerte polémica en la que está inmerso desde la marcha del pasado jueves.

Asimismo, tras acusar a Blumberg de no mostrar "interés en tener información" sino de estar más "preocupado" en que se lleven adelante las medidas que "él propone" en materia de seguridad, advirtió que "habrá que ver quién le da letra".

El funcionario consideró que la tercera marcha de Blumberg realizada el jueves ante el Congreso nacional, en realidad, fue "un acto de venganza por la designación de (la procuradora de la provincia, María del Carmen) Falbo" y recordó que el propio padre de Axel había amenazado con hacerla si se producía el nombramiento.

El ministro volvió a lamentar los duros cuestionamientos lanzados por Blumberg en contra de la administración de Solá. "Espero que esto no forme parte de un intento de sesgar la seguridad endilgándole peso y responsabilidad exclusivamente a la provincia de Buenos Aires", advirtió.

Si bien reconoció que en el ámbito bonaerense "hay hechos serios y hay inseguridad", ratificó que hay un plan en marcha en esa materia. "El tema de seguridad demanda tiempo para su armado; yo lo estoy haciendo, pero hay que tener mucha paciencia", resaltó.

Luego de realizadas esas declaraciones, y en la misma emisora, Blumberg advirtió que "lo que dice (Arslanian) es totalmente mentira, inclusive voy a llamar a este señor porque con lo que dice me está difamando. Es lamentable que se exprese de esta manera, no sé qué intencionalidad tiene".

Para el empresario, el ministro bonaerense "se siente presionado" por sus críticas "y está inventando cosas".

Blumberg admitió tener protección de la Policía Federal, pero negó terminantemente que la Nación financie la Fundación Axel que creó luego del secuestro y asesinato de su hijo en marzo pasado.

"Nuestra organización es muy chiquita", esgrimió el hombre y le pidió a Arslanian que "no se salga por la tangente hablando pavadas porque con eso no va a mejorar en nada la seguridad de la provincia".

Blumberg dijo que "pagaría por no estar" en el lugar que ocupa y dijo que "queremos sumar y no restar", al tiempo que aclaró que a Arslanian y al gobernador Felipe Solá los va a "apoyar".


Repulsa piquetera
Dos de los grupos piqueteros más cercanos al gobierno, y otro opositor, criticaron ayer a Blumberg por sus manifestaciones contra los organismos de derechos humanos y lo acusaron, entre otras cosas, de ser "la versión argentina del Ku Klux Klan".

El titular de la Federación de Tierra y Vivienda (FTV) y diputado bonaerense, Luis D'Elía, y el referente del Movimiento Barrios de Pie (MBP) y funcionario del Ministerio de Desarrollo Social, Jorge Ceballos, cuestionaron las críticas del empresario.

"Hay un corrimiento a la derecha muy fuerte del señor Blumberg", ya que "muchas de sus definiciones son de corte racista", dijo D'Elía, al tiempo que advirtió que "nunca la radicalización de derecha fue buena en las sociedades".

"El jueves nos pareció ver en Blumberg la versión argentina del Ku Klux Klan", continuó el titular de la FTV, en referencia a la agrupación racista que asoló el sur de los Estados Unidos durante la primera mitad del siglo XX.

"Nos dolió mucho la descalificación a los organismos de los derechos humanos, y nosotros nos preguntamos qué es lo que estaba haciendo él desde el 76 al 83", continuó.

Por su parte, Ceballos aclaró que las manifestaciones de Blumberg "tienen un carácter muy estrecho" y sus declaraciones "remiten a los 70, a la dictadura militar, cuando se producía la violación sistemática de los derechos humanos".

Ambos dirigentes piqueteros oficialistas reconocieron el dolor de Blumberg por la pérdida de un hijo, pero no compartieron sus expresiones frente al Congreso nacional, cuando aseguró que "ningún dirigente de os derechos humanos se acercó" a él cuando mataron a su hijo.

Néstor Pitrola, del Bloque Piquetero Nacional, enfrentado al Ejecutivo, tuvo manifestaciones similares a las de Ceballos y D'Elía, aunque acusó al "PJ de Kirchner y Duhalde" de "ceder a la presión derechista y fascistizante de Blumberg". (DyN y Télam)

Arslanian acusó a Blumberg de ser selectivo respecto de a quién critica.