Mariani, el cura polémico, visitó al arzobispo cordobés

El sacerdote que publicó su biografía donde contó su vida sexual, dijo que el encuentro fue "positivo"

El cura párroco Guillermo "Quito" Mariani, quien despertó una profunda polémica tras publicar un libro en el que relata sus experiencias sexuales, se reunió ayer con el arzobispo de Córdoba, monseñor Carlos Ñáñez, tras el durísimo comunicado emitido por ese sector eclesiástico.

Mariani destacó que el encuentro fue "positivo" y expresó que en Ñáñez "no hubo ninguna expresión de autoritarismo, ni de poder", a la vez que le dijo que no tiene interés en sancionarlo y que va a esperar el dictamen del Tribunal Interdiocesano para emitir un juicio".

"Fue conversar entre dos personas, lo noté nervioso a él, y yo tenía interés de saber que, si iban a pedir sanciones al Vaticano, cuál era el delito que yo había cometido", indicó el sacerdote en declaraciones a Canal 8 de Córdoba.

El polémico sacerdote de 77 años advirtió que para echarlo de su parroquia La Cripta, del barrio Villa Belgrano, "tendrán que hacer un juicio eclesiástico".

Por la mañana, había considerado "muy duro" el comunicado del Arzobispado de Córdoba que desaprobó su libro "Sin Tapujos, la vida de un cura", en el cual el padre cuenta, entre otras cosas, relaciones sexuales que mantuvo a lo largo de sus 53 años de sacerdocio.

La publicación, que se vendió anteayer como pan caliente y que se agotó a las pocas horas, critica el celibato impuesto por la Iglesia Católica.

"Desapruebo las manifestaciones realizadas por Mariani y me duele profundamente la confusión y perplejidad que han generado en muchas personas", sostuvo el obispo Ñáñez.

Mariani había aseverado ayer a la mañana que celebraría misa, como siempre, pero por la tarde tuvo que suspender un oficio religioso porque estaba agotado.

En la publicación, Mariani no sólo cuenta sus experiencias amorosas, sino también su vida como sacerdote luego de ordenarse en el año 1951. También narra los ataques y persecuciones que sufrió en los años del proceso militar y su amor por el scoutismo.

Por otra parte, representantes legales de la Ediciones de la Docta presentaron ayer una denuncia penal contra Mariani por "usurpación de marca, al haber fraguado el sello" en su obra, y para aclarar que no tiene nada que ver con "la impresión y/o publicación del libro".

En ese sentido, el cura dijo oportunamente al canal 10 de la televisión local que desconocía el hecho y que todo su contrato para su impresión y distribución la realizó con el Emporio del Libro, principal responsable de la venta del ejemplar. (DyN y Télam)