| sábado, 12 de junio de 2004 | En los pulmones había lesiones causadas por una droga La madre de un joven muerto dice que lo forzaron a aspirar un spray La hipótesis es que un poderoso analgésico le provocó un paro cardiorrespiratorio Jorge Salum / La Capital La mamá de Nicolás Rodríguez, el chico de 14 años que murió como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio provocado presuntamente por aspirar un anestésico en spray, le dijo a la fiscal que interviene en la investigación del caso que al chico lo obligaron a hacerlo. La mujer aseguró literalmente que a su hijo "lo asesinaron", aseveró que sabe quiénes lo hicieron y pidió que su denuncia se investigue. Ahora el juez a cargo citará a declarar a las personas que según la madre del chico presenciaron el incidente, en cuyo relato se basa ella para asegurar que fue víctima de lo que llama un crimen.
Nicolás murió la noche del 26 de mayo poco después de entrar al ex policlínico municipal San Martín, de Guatamela y Chubut, en la zona oeste de la ciudad. Había llegado en estado de inconciencia pero aún respiraba y los médicos del centro asistencial hicieron todo lo posible por reanimarlo, aunque sus esfuerzos resultaron finalmente infructuosos.
Por los datos que aportaron sus amigos, los mismos que lo llevaron hasta el hospital cuando se descompuso, enseguida se sospechó que su muerte había sido provocada por la inhalación de alguna sustancia alucinógena. Luego, por los datos que aportaron los mismos chicos, las miradas apuntaron hacia un poderoso antiinflamatorio con corticoides y anestésicos utilizado localmente por los deportistas. Se trata de un medicamento que se puede adquirir sin receta médica y que según algunos especialistas es cada vez más empleado por los chicos como alucinógeno.
Cuando se produjo el deceso de Nicolás se dijo que aquella noche el chico había asistido a una fiesta de cumpleaños. Pero ayer Viviana López, su mamá, dijo que había salido a hacer un mandado para ella y que luego se encontró con unos amigos en el barrio donde vivía, en Donado al 1300. Fue en ese momento cuando, según ella, lo obligaron a inhalar la sustancia que luego lo mataría.
"Mi hijo está muerto pero yo sigo viva y voy a investigar hasta saber qué pasó", dijo López. Luego contó lo mismo que le había dicho antes a la fiscal Adriana Camporini: sostuvo que habló con los chicos que estaban con Nicolás cuando aspiró el contenido de un spray, y que fueron ellos quienes le revelaron cómo y por qué lo había hecho. "Lo obligaron", repitió una y otra vez.
Según ella, un sujeto que estaba a bordo de un auto roció el spray en la muñeca de Nicolás y lo forzó a aspirarlo. López afirma que sabe quién es esa persona, y las que estaban con él, y le dio sus nombres al juez con el propósito de que los investigue.
La existencia de la denuncia fue confirmada ayer por la fiscal Camporini, quien sin embargo supeditó la veracidad de la denuncia a los resultados de la investigación. La funcionaria judicial dijo que ante este hecho el primer paso consistirá en citar a los supuestos testigos para que declaren ante Prunotto Laborde.
No obstante, las causas de la muerte de Nicolás aún son materia de una profunda pesquisa. El forense Víctor Frigeri, del Instituto Médico Legal, contó ayer a La Capital que el deceso se produjo por asfixia y reveló que en la autopsia se hallaron lesiones pulmonares provocadas presuntamente por la inhalación de drogas.
Sin embargo, todavía no está claro qué tipo de drogas pudieron haber provocado esas lesiones. "Por eso recomendamos realizar un análisis específico, lo que nos permitirá verificar si realmente fue el anestésico bajo sospecha", narró el profesional. Los resultados de esos estudios aún no se conocen.
Según Claudio Bertone, uno de los médicos que atendieron a Nicolás en el San Martín, los chicos que lo llevaron hasta allí llevaban un envase del analgésico Algispray, que fue lo que presuntamente inhaló el chico. Pero ahora nadie sabe dónde está ese envase, ya que los testigos nunca se lo entregaron a la Justicia. enviar nota por e-mail | | |