Rugby: Duendes ganó el clásico de Las Delicias

Aníbal Fucaraccio / La Capital

Hay momentos en que determinados equipos sacan provecho de toda la experiencia y el oficio que ganaron en el roce de exigentes rodeos. Eso hizo Duendes ayer en el segundo tiempo. Leyó criteriosamente las circunstancias del partido, actuó en consecuencia y con algunos cambios tácticos y otros de nombres definió un encuentro que se presentaba muy parejo hasta los 18 minutos del complemento. Así, los verdinegros se alzaron con un justo triunfo por 42 a 18 ante Universitario en otra edición del vibrante clásico de Las Delicias, que fue uno de los cotejos más destacados de la octava fecha del torneo Regional del Litoral que pone en juego la Copa Volkswagen.

De esta manera, los locales resignaron el liderazgo y el invicto en el certamen ante un adversario que hizo gala de sus mejores recursos cuando los requerimientos de un trámite más que disputado así lo imponían.

El comienzo fue un homenaje a la intensidad. Los dos conjuntos sabían lo que estaba en juego y se desvivieron por obtener la pelota a través de una gran presión, que en reiteradas ocasiones desembocó en descontrol. Las acciones estaban gobernadas por el vértigo emocional que se imponía por prepotente sobre las ideas.

Gonzalo Farré fue el primer iluminado de la tarde y con un brillante kick habilitó a Fachetti en el try que rompió el cero. Uni respondía con sus armas, apoyándose en su intención de darle vuelo a la ovalada. Fue así como Ciccale encontró un sorpresivo hueco entre rivales y apoyó abajo de la hache. Ambos estaban decididos a cambiar golpe por golpe.

Simón Boffelli se adueñaba del line out y las terceras líneas se sacaban chispas en la disputa del suelto. Así, en un contexto de gran paridad, los tries de Iguri y el entrerriano Méndez le colgaron el cartel de empate al entretiempo.

El complemento planteó en su arranque el mismo panorama. Mucho corazón en un clásico caliente y presumía de atractivo desde lo emotivo.

Pero Duendes reformuló su postura a través de un par de cambios fundamentales. Salieron Gulino y Villalonga e ingresaron Escalante y Miralles, pasando Leandro Bouza como apertura. Con un nuevo libreto proveniente del cuerpo técnico y con aires renovados que le dieron las variantes realizadas, los verdinegros comenzaron a edificar un resultado positivo con gran suficiencia.

El pack visitante exhibió su jerarquía y le hizo sentir rigor a su adversario, los nuevos conductores acertaron a la hora de manejar el juego y la holgada diferencia final se generó por absoluto peso específico. Ese que Duendes saca a relucir cuando quiere.

La anotación del entrerriano Adriánm Méndez inició el camino al triunfo verdinegro.