Al Qaeda atacó el corazón de la región petrolera de Arabia Saudita

Los terroristas se atrincheraron, con al menos 50 rehenes extranjeros, en un complejo habitacional

Ryad. - Un comando de terroristas de Al Qaeda atacó ayer el corazón de la región petrolera de Arabia Saudita y luego de matar a una decena de civiles se atrincheró en un complejo residencial, donde tomó al menos 50 rehenes. El lugar fue acordonado por las fuerzas policiales sauditas. Anoche se oían disparos provenientes del edificio, pero las autoridades dijeron que por el momento no asaltarían el sitio porque los terroristas contaban con gran cantidad de explosivos y temían una masacre de rehenes. El ataque, perpetrado en la ciudad petrolera de Jobar, sobre el golfo Pérsico, fue reivindicado por la red de Bin Laden.

El nuevo atentado tuvo como evidente objetivo a las empresas petroleras extranjeras y las residencias de sus empleados, y puede tener gran repercusión en el ya recalentado precio del petróleo. Una sucesión de atentados contra extranjeros que trabajan en la industria petrolera saudita comenzó el año pasado, con el plan de amedrentarlos y obligarlos a huir del país. De hecho, EEUU aconsejó a sus ciudadanos abandonar a Arabia Saudita.

El ataque comenzó a las 7.30 de la mañana, cuando un grupo de hombres vestidos con uniformes de la policía saudita tomó la sede de la empresa árabe Apicorp, en el centro de Jobar. Seis personas murieron en este episodio, incluido un niño egipcio de 10 años, hijo de un empleado. Dos guardias sauditas, un ciudadano británico, además de un paquistaní y dos filipinos, también cayeron acribillados. Pocos minutos después un ciudadano indio murió tiroteado. A las 8, el comando atacó el Petroleum Center de la ciudad, a unos tres km de distancia del punto anterior, donde mataron al menos a otras cuatro personas, incluyendo a un norteamericano. Luego los terroristas se desplazaron hacia la zona habitacional y se atrincheraron en el complejo Oasis, un edificio residencial de lujo de seis pisos de altura. Poco después la policía cerró el área, mientras se escuchaba un intenso fuego de armas livianas. Un numeroso grupo de rehenes libaneses fue dejado libre. Se cree que los rehenes que quedaron en manos de los terroristas son occidentales o asiáticos.


Comunicado del príncipe
El príncipe heredero y gobernante de hecho Abdullah aseguró en una declaración oficial que los terroristas mataron a 10 personas, entre ellas un niño. Los atacantes realizaron tiros al azar, afirmó. Las fuerzas de seguridad sauditas abatieron abatieron a cinco atacantes, según los medios.

La petrolera Apicorp, una empresa multinacional de los países de la Opep, informó que tres de sus empleados murieron en el ataque contra sus oficinas en Jobar.

La rama de Al Qaeda en la Península Arábiga se adjudicó la autoría del atentado en una página web islamita donde la red de Osama Bin Laden ya difundió mensajes en anteriores ocasiones. El ataque estaba dirigido contra empresas estadounidenses que "se especializan en actividades del petróleo y la exploración y en robar las riquezas musulmanas", dice la declaración.

El complejo habitacional Oasis, de 5 estrellas, a 400 kilómetros de Ryad, alberga a numerosos extranjeros que trabajan para empresas petroleras estadounidenses.

El ataque de ayer tuvo lugar a menos de un mes de otro perpetrado el 1º de mayo en la ciudad de Yanbu, en el oeste del país, a cargo de varios hombres armados que mataron a cinco occidentales y un policía saudita en las oficinas de una empresa petroquímica. Entre las víctimas había dos estadounidenses, dos británicos y un australiano. Además, el pasado fin de semana, un alemán fue asesinado en plena calle en Ryad por extremistas islámicos. Los terroristas arrastraron el cadáver de su víctima y entre gritos de "Alá es grande" llamaron a los paseantes a plegarse a la Yijad, o guerra santa islámica, y seguir el ejemplo de los milicianos que resistieron al ejército de EEUU en la ciudad iraquí de Falluja.

Un auto calcinado en las calles de Jobar, centro petrolero del golfo Pérsico.