La propuesta oficial, con escaso quórum

Los analistas critican el fondo de equidad social. Para algunos gobernadores no aporta cambios sustantivos

El proyecto de nueva ley de coparticipación que el gobierno nacional presentó a las provincias sirvió como mecha para encender un nuevo debate por el reparto de los fondos.

"Esta es una ley que no puede votar ninguna provincia central", dijo el gobernador de Buenos Aires, Felipe Solá y el mismo argumento alzan los gobernadores de Santa Fe y Córdoba.

Para el economista Martín Lousteau, quien participó del debate del Cippec, "el actual proyecto quiere mantener vigente todo como está. Esto está demostrado con el fondo de equidad social, que se queda con el 24%. Es decir, con este proyecto lo que quiere la Nación es un aumento temporario de la capacidad discrecional en cuanto al gasto y luego volver al statu quo".

"El proyecto del Ejecutivo hoy dice que se les va a proponer a las provincias adherir a un pacto fiscal y el gobierno nacional creará un fondo que lo va administrar como se le ocurra y por ahí le tira algo a las provincias. Esto se toma como una cosa natural y no como un insulto", dijo Pinedo.

El senador Capitanich explicó que el proyecto de la Nación propone aspectos en materia de coparticipación federal de impuestos.

1- Garantiza la percepción de recursos provinciales de acuerdo al flujo recibido durante 2004.

2- Establece una modificación en el mecanismo de distribución de reparto. Es decir, los recursos que se implementen a partir del 2005 se van a distribuir en dos formas. Por un lado, el 76% y por otro lado el 24%. El 76% se distribuye a 90% de acuerdo a los actuales índices y el restante 10% por un índice de eficiencia fiscal, que está expresado desde el punto de vista global pero no especificado. El 24% restante se establece sobre la base de un fondo de equidad social por un plazo de diez años en donde una primera parte se distribuye a un fondo para NOA-NEA y también para grandes aglomerados que no están definidos expresamente.

3- Expresa parámetros de responsabilidad fiscal, establecidas sobre la base de una serie de enunciados pero sin precisiones.

"Las provincias del norte prestaron consentimiento sobre base de concesiones que pretenden conservar", dijo Capitanich. "En rigor las provincias más endeudadas plantean la necesidad de que la Nación ayude a saldar sus deudas y en segundo lugar, un mecanismo que permita financiar el déficit previsional de las cajas, las que no las transfirieron", dijo.

Santa Fe es una de las administraciones que no ve con buenos ojos esta propuesta, al menos si no se garantizan ciertas pautas especialmente para compensar la buena administración que viene llevando adelante desde hace años.