El Congreso brasileño otorga un respiro al gobierno de Lula

Diputados aprobó el cierre de los bingos decretado por el presidente tras el estallido del escándalo de corrupción

Brasilia. - El gobierno de Brasil obtuvo una muy necesitada victoria política en el Congreso cuando la Cámara de Diputados aprobó ilegalizar los juegos de loterías conocidos como bingos, en una medida dirigida a erradicar una fuente de financiamiento ilegal de campañas políticas. La medida, que ahora debe ser aprobada en el Senado, fue adoptada por 295 votos a favor, 73 en contra y 2 abstenciones, precisó la Cámara en su sitio internet.

Esta aprobación, en la noche del martes, también fue vista como una prueba de la fortaleza del gobierno, golpeado por un escándalo centrado en un empresario vinculado al juego que tenía contactos con un asesor del jefe de gabinete del presidente Luiz Inacio Lula da Silva.

En respuesta, el gobierno prohibió los bingos, argumentando que eran una fuente de fondos de campaña ilegales y de lavado de dinero. Han circulado especulaciones de que el submundo de los bingos filtró la información que hizo estallar el escándalo, en un intento de presionar al gobierno para que no regulara esa industria.

La Cámara baja ratificó el decreto del gobierno en términos generales. Este debe ser sometido a votación artículo por artículo antes de ser enviado al Senado.

El texto adoptado anula todas las "licencias, permisos, concesiones y autorizaciones para la explotación de ese tipo de juego de azar" y dispone "la revocación de todos los contratos vigentes sin ningún tipo de indemnización". Los mayoría de los bingos funcionaban hasta su prohibición expresa el 21 de febrero amparándose en legislaciones o autorizaciones extendidas por los Estados brasileños, sin aval de la ley federal. A pesar del amplio apoyo dado por legisladores de todas las bancadas a la medida, las negociaciones para obtenerlo fueron difíciles.


Desempleados
La decisión de cerrar los bingos dejó a miles de personas sin trabajo en un momento de alto desempleo en Brasil. Sin embargo, su aprobación es una señal de que el gobierno puede avanzar con sus proyectos en el Congreso, incluso después de que estallara el escándalo, que golpeó su popularidad en recientes encuestas y afectó los mercados financieros.

El escándalo estalló el 13 de febrero luego de que se divulgara un video en el que se muestra a Waldomiro Diniz, asesor del jefe de gabinete, José Dirceu, pidiendo dinero para él y para financiar campañas políticas al empresario del juego Carlos Augusto Ramos, conocido como Carlinhos Cachoeira.

Diniz, en la época en que fue grabado el video, en 2002, era titular de la Lotería del Estado de Río de Janeiro. El funcionario fue despedido y está bajo investigación.

Ningún funcionario brasileño de alto rango fue acusado por algún hecho incorrecto. Pero el gobierno ha sido criticado por haber hecho poco para terminar con el escándalo y por permitir que éste lo distrajera de su agenda económica. (Reuters y AFP)

Lula consiguió el aval del legislativo para el cierre de los juegos ilegales.