Crisis. El gobernador cree que el peronismo no se fracturó en Parque Norte

Obeid critica la transversalidad y hace causa común con Duhalde

Calificó de "oscura" la estrategia de quebrar al PJ y dijo que Chacho Alvarez es el mentor de la operación

Jorge Sanso de la Madrid / La Capital

Reacio a hacer declaraciones después del congreso peronista de Parque Norte del viernes, el gobernador Jorge Obeid aceptó recién en la tarde de ayer hablar con La Capital. Para entonces el ministro del Interior, Aníbal Fernández, había descalificado el encuentro diciendo que fueron discusiones de "alta peluquería y valor cero", asegurando que "con excepción del nuevo titular partidario, Eduardo Fellner, al presidente no le satisface quienes están al frente de la conducción". Uno de ellos es, precisamente, Obeid.

Pero como nunca al gobernador se lo advirtió contenido. Respondiendo elípticamente. Desmintiendo a Fernández, sin nombrarlo, al afirmar que el congreso fue importante precisamente porque dio "una conducción representativa", aunque sorprendió a deslizar que el ex presidente de la Alianza, Carlos Chacho Alvarez, está detrás de la idea de la transversalidad a la que, una vez más, descalificó con énfasis. Y, aunque dando muchos rodeos, dejó en claro que está más cerca de Eduardo Duhalde que de Néstor Kirchner, sin olvidarse del equilibrio de poder que debe mantener con Carlos Reutemann.

-¿Qué pasó en el congreso peronista de Parque Norte?

-Lo más importante es lo que menos trasciende: después de varios años sin conducción real, el peronismo se dio autoridades mediante un consejo en el que están representadas todas las provincias. Recreó, además, un organismo valioso como es la Escuela Superior de Dirigentes.

-¿No quedó al borde de la fractura?

-No, de ninguna manera.

-¿Cómo define entonces al duro debate que sacude a su partido?

-Es innegable que hay un debate. Al ser un movimiento tan grande, los debates en su seno trascienden y son casi del conjunto de la sociedad. No todos pensamos lo mismo. Y ese debate por ahí toma ribetes de mayor dureza.

-¿Como en el congreso del viernes?

-Sí, pero a mi juicio no significa posibilidad de ruptura.

-Desde afuera la deliberación se vio como un round entre peronismo versus kirchnerismo.

-No interpreto que sea así. En definitiva, todos los que estuvimos allí somos peronistas y todos apostamos al éxito del gobierno del presidente Kirchner.

-¿No es esa la fórmula presentable desde el discurso correcto pero ajeno a la realidad?

-Puede que lo sea para alguien, pero yo soy peronista y no estoy en contra del peronismo y quiero que al presidente le vaya bien, por lo que tampoco estoy en contra de su gobierno. Son otros los matices que se discuten.

-¿Va a negar el matiz anti-transversalidad que se advirtió en el congreso?

-Pero eso es otra cosa...

-Eso es el proyecto del presidente y no el del peronismo.

-Yo nunca lo oí al presidente de la República hablar de la transversalidad.

-Y yo nunca lo escuché desautorizar a quienes hablan por él avalando la iniciativa...

-Pero nunca se lo escuché a él, y sí a un montón de operadores de segunda y tercera línea que han desembarcado en la provincia.

-A quienes entretiene con café y alfajores...

-Es que es además un mensaje muy confuso. En realidad nadie sabe qué es la transversalidad. Sabemos que en sus orígenes fue una idea planteada por el exitoso político Chacho Alvarez, que no sólo destruyó el propio movimiento que él había creado sino que junto a De la Rúa destruyó el país. Ahora algunos retoman esa idea y hay quienes dicen que está el propio Alvarez manejándola desde las sombras.

-¿Usted sigue sin comulgar con esa idea?

-Es muy oscura. No la entiendo y además, como ya le he dicho, intentos de llevarse dirigentes del PJ o de destruir al PJ he visto muchos a lo largo de mis 40 años de militancia. Todos fueron un fracaso. Así que ni siquiera es algo nuevo, se puso de moda otra vez y va a terminar en el olvido. Eso sí es claro.

-Lo que también está claro es que la nueva dirigencia del PJ de la que usted forma parte no va a mover un dedo por la transversalidad que quiere el presidente.

-Insisto en que no se lo puede hacer responsable al presidente. Y le digo que esta conducción si logra movilizar al peronismo como se pretende todas estas ideas que tengan algunos peronistas, de hacer una estructura por fuera, quedarán en el olvido.

-¿Esa movilización la piensan lograr con el liderazgo de Fellner?

-No es demasiado conocido pero es un gobernador, un hombre de diálogo que va a ser capaz de convocar a todos los sectores.

-¿Será capaz también de sobreponerse a la pulseada Kirchner-Duhalde que evidenciaron las cónyuges de ambos en el debate de Parque Norte?

-No va a ser así. Fundamentalmente, porque el propio Duhalde no quiere. He conversado con él y su intención es mantenerse fuera de la interna peronista. El ya jugó una etapa importantísima y su intención es la de estar al frente de la escuela de formación política del peronismo creando ámbitos para la formación de cuadros militantes y dirigenciales.

-¿Usted lo acompañará en esa tarea?

-Así es. El me lo había pedido, pero sorprendió que lo pusiera en la carta que envió al congreso.

-¿Una muestra de su alianza con Duhalde por la que tanto le desconfían los kirchneristas?

-El conoce mi idea respecto a la necesidad de formar los cuadros del PJ. Por eso me pide lo acompañe, lo cual constituye un honor. No constituye una definición en la interna.

-¿Pero es el mismo Duhalde que antes lo quiso de candidato a vice en la fórmula presidencial y después de ministro del Interior o jefe de Gabinete cuando fue presidente?

-Es el Duhalde que también es mi amigo, y a eso no lo puedo ocultar.

-¿Se le fue el enojo porque quedó afuera del acto en la Esma?

-No fue enojo, estuve dolido, sí. Creo que no necesito explicar las razones por las que decidí no ir.

-¿Fue más doloroso que lo impugnara Hebe de Bonafini antes del acto o que Fernández minimizara la ausencia de los gobernadores después de realizado?

-Prefiero no contestar.

"Duhalde es mi amigo, y a eso no lo puedo negar", blanqueó el jefe de la Casa Gris.