| sábado, 27 de marzo de 2004 | El municipio podría dar marcha atrás con el plebiscito previsto para junio Obeid y Lifschitz tendrán una reunión clave por la autonomía El encuentro será el lunes en Rosario. El intendente no descartó rever la idea de la consulta popular La autonomía municipal será el tema clave que reunirá al gobernador Jorge Obeid y al intendente Miguel Lifschitz pasado mañana sobre el mediodía, en el Palacio de los Leones. Y no se descarta que los mandatarios hablen allí del plebiscito que Lifschitz anunció para junio próximo con el fin de definir el apoyo y los alcances del tema. Es que ya se instalaron fuertes rumores de que el municipio estaría reviendo la idea de llevar adelante la consulta popular y las versiones no fueron confirmadas ni desmentidas ayer por el intendente al ser consultado por La Capital.
No obstante, el coordinador del Gabinete municipal, Angel D'Ambrosio, dijo que seguía en pie la organización de conferencias en las que se le explicará a la gente de qué se trata la autonomía y en qué consistirá el plebiscito. "No consultaremos con la ciudadanía si está de acuerdo o no con el tema porque sabemos que contestará que sí, sino que abordaremos los aspectos políticos, económicos, financieros, administrativos e institucionales por los que vamos a bregar", detalló D'Ambrosio.
Otro tema que seguramente no dejará de conversarse en la reunión entre Obeid y Lifschitz será el de los resultados de la encuesta publicada anteayer por este diario. El trabajo sobre la autonomía municipal, realizado por el estudio Mautone y Asociados, abordó a 400 rosarinos y un 60 por ciento de ellos se volcó en favor de que la ciudad se separe directamente de Santa Fe. Plantearon así una autonomía plena como la de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y también se expresaron en favor de una consulta popular. "¿Habría que hacer un plebiscito por la autonomía?", se preguntó. Y 7 de cada diez contestaron que "sí".
El espíritu secesionista de los rosarinos sorprendió a más de un político, funcionario e intelectual que, sin embargo, entendió los motivos de la reacción colectiva. Este diario publicó ayer el análisis de algunas personalidades que coincidieron en decir que los altos porcentajes en favor de la separación obedecen al cansancio y hasta al "hartazgo" de depender de la burocracia provincial.
Junto a los resultados del estudio de Mautone se publicaron los de otro sondeo realizado por Glavinich, Estudios de Mercado y Opinión Pública. También en esta oportunidad se encuestó a 400 personas que en un 84 por ciento consideraron al debate por la autonomía municipal como "importante" o "muy importante".
Un porcentaje similar se dio en relación a la pregunta sobre el plebiscito: "¿Usted iría a votar?", fue el interrogante. Y un 82,7 por ciento de la gente se volcó por la opción afirmativa.
¿Plebiscito sí o no? La consulta popular anunciada por Lifschitz el 4 de marzo pasado, cuando abrió el período de sesiones ordinarias del Concejo, fue inmediatamente cuestionada desde el gobierno provincial. El primero que la descalificó fue el propio Obeid al decir que no era necesario acudir a un plebiscito cuyo resultado "todos conocemos de antemano". Así dio por supuesto que el "sí" sería rotundo.
Tras él, y en la misma sintonía, salió al ruedo el actual ministro de Gobierno provincial, Roberto Rosúa (por entonces diputado provincial por el Partido Justicialista). "Existe el camino de la ley para avanzar de inmediato respecto de la autonomía municipal", sugirió el funcionario.
Su propuesta apunta a la modificación de leyes provinciales para establecer un nuevo régimen electoral para los municipios, definir un código de faltas según la idiosincrasia de cada localidad y dictar leyes sobre recaudación.
"A las reformas -había dicho Rosúa- las podemos plantear como una agitación política o como un acto institucional, razonado y racional. Debemos ponernos a trabajar sobre la autonomía, y después en aquello que las leyes no cubran".
De este modo, la provincia sentó su posición frente a la propuesta municipal que tendría que ponerse en marcha dentro de sólo tres meses. Y si bien fuentes cercanas al intendente hablan de que la consulta popular sigue viento en popa, aún no hay precisiones sobre cómo se organizará ni cuánto costará realizarla.
"Por ahora estamos estudiando la propuesta de un grupo de organizaciones no gubernamentales que se ofrecieron a cumplir el rol de contralor durante el plebiscito, algo que entre otras cosas abaratará los costos de esta iniciativa", señalaron las mismas fuentes del municipio. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El tema del plebiscito pone al intendente y al gobernador en veredas opuestas. | | |