El velo y la cruz polemizan en Alemania

Berlín. - El presidente del Parlamento alemán, Wolfgang Thierse, criticó al jefe de Estado, Johannes Rau, por equiparar los símbolos religiosos y afirmar que, si se prohibía el velo islámico en los colegios, se debía retirar también los crucifijos de las aulas, según una entrevista difundida ayer. "Una cruz no es un símbolo de opresión, pero el velo en la cabeza para muchas mujeres musulmanas sí lo es", dijo Thierse, del Partido Socialdemócrata (SPD), en declaraciones adelantadas por el dominical Tagesspiegel am Sonntag.

Thierse resaltó que el Estado "por principio debe mantener la neutralidad ante todas las religiones". No obstante, consideró que la cuestión central a la hora de equiparar la cruz con el velo es si éste último es sólo un símbolo religioso, algo que Thierse puso en duda.

El presidente del Parlamento hizo referencia además a que las periodistas alemanas enviadas a Irán deben llevar un velo islámico para adaptarse a las costumbres del país. "¿No se puede entonces exigir a las ciudadanas musulmanas de nuestro país que respeten las costumbres y convicciones básicas de nuestro país?", se preguntó.


La polémica
En una entrevista hace una semana, el presidente Rau, un cristiano luterano, afirmó que "si el velo en la cabeza es considerado una profesión de fe, una prenda textil misionera, entonces debe ser así también con el hábito de monje, con el crucifijo". Por ello, según el mandatario, si a las profesoras musulmanas no se les permite dar clase con el velo puesto, se deberían retirar también los crucifijos de las aulas.

Dichas palabras trajeron a Rau numerosas críticas por parte de la Iglesia Católica, además de políticos de diversa tendencia. Sin embargo, en declaraciones que publica Welt am Sonntag se defendió nuevamente afirmando que él nunca se pronunció ni a favor ni en contra de que las profesoras de los colegios alemanes lleven el velo islámico.

Rau reiteró que si se respeta el principio de igualdad, una prohibición del velo islámico implicaría también prohibir el hábito de monje en las aulas. Así, llamó a los gobiernos de los estados federados, responsables de la gestión de los colegios, a ser consecuentes a la hora de legislar al respecto.

"Nuestra Constitución establece el trato igualitario de las religiones en el ámbito público, es decir, también en las escuelas. Con ello no se cuestiona nuestra herencia cristiana", dijo el presidente. (DPA)

El presidente Johannes Rau.