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 sábado, 03 de enero de 2004

"Que no le pase a mi familia"

Después del devastador sismo en la ciudad iraní de Bam, cientos de voluntarios y trabajadores de rescate de distintas organizaciones internacionales se han acercado a Irán para ofrecer su ayuda. Mehdi Eshraqi es uno de ellos. Y desde el lugar del desastre desgranó sus experiencias tal como se sucedieron, con un relato vivo que pinta el horror que han vivido los habitantes de la zona afectada .

"El piloto me dice que vamos a aterrizar en el aeropuerto de Bam en unos minutos. No sé con qué me voy a encontrar. El área cerca de la pista está plagada de aviones militares y civiles, grandes y pequeños. Con dificultad, nuestro grupo de voluntarios logró encontrar un autobús para viajar a Bam. La ciudad está lejos.

"Fuimos al campamento donde se encuentran los enviados de las agencias de ayuda humanitaria y allí comenzamos a trabajar en grupos de cinco.

Nuestro automóvil se está dirigiendo a la ciudadela de Bam. Allí un hombre nos detiene, está llorando. Nos suplica que lo ayudemos a rescatar a su hijo. Dice que puede escuchar su voz bajo los escombros. El mismo fue rescatado bajo una pila de ladrillos de arcilla. Tenemos que caminar hacia su casa. Llegamos. No queda nada en pie. En los trozos de pared que quedan puedo ver láminas con dibujos de animales.

"La cantidad de escombros es tan grande que hicimos traer una excavadora para que nos ayude. Es posible que el filo de la máquina corte el cuerpo de sus hijos en pedazos.

"Cuando la máquina comienza a trabajar, encontramos los cadáveres. El se arroja sobre los cuerpos y llora fuerte. En cuestión de segundos perdió el resultado del esfuerzo de toda su vida. Cuando veo esta escena, pierdo el control y yo también me echo a llorar", relata Eshraqi, cuya voz refleja también su angustia.

"Las excavadoras que recogen los restos de lo que fue Bam cortan cuerpos en pedazos creando escenas espantosas. Cuando levanto el cuerpo de una madre pienso: ¿Qué haría si fuese mi propia madre? Espero que nunca me pase a mí, a mi familia ni a nadie".

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