BRASIL

Rio de Janeiro: carnaval carioca

Descanso en Copacabana, visita a la Floresta de Tijuca y ascenso al cerro Pan de Azúcar

La extraordinaria belleza de la bahía de Guanabara deslumbró a los primeros portugueses que llegaron a la región. En sus orillas creció Río de Janeiro, considerada en todo el mundo como la "ciudad maravillosa". Presenta una combinación perfecta de mar, tierra, clima y gente cordial y divertida. Capital del Brasil durante casi 200 años, Río tiene una notable movida cultural que se despliega en cines, teatros, museos, salas para conciertos, casas de espectáculos, galerías de arte y bibliotecas.

Otro de los motivos de atracción es su legado arquitectónico, que se evidencia en iglesias y monasterios barrocos, fachadas residenciales art-decó y casonas con arquitectura modernista de los '50. Playas insuperables y el vértigo de una ciudad que no duerme invitan a disfrutar de unos días intensos entre garotas esculturales y a la sombra de cocoteros que mueven el follaje al ritmo de la brisa marina.


Imperdibles
* Jardín Botánico: caminatas a la sombra de cocoteros y alamedas.

* Floresta de Tijuca: cercana a la zona sur, es un bosque tropical exuberante, con cascadas y caídas de agua dentro del perímetro urbano.

* Ascenso al Corcovado: allí se encuentra el Cristo Redentor, de brazos abiertos sobre la bahía de Guanabara. Al mirador se arriba en auto o en el funicular que sube la sierra cortando el bosque.

* Año Nuevo en Copacabana: la gente vestida de blanco ocupa casi toda la rambla y la playa. A medianoche empieza un espectáculo de fuegos artificiales que hace delirar a la multitud.

* Pan de Azúcar: está en la entrada de la bahía de Guanabara. Se accede a través de un teleférico panorámico que ofrece una de las vistas más bellas de la ciudad.

* Infraestructura: Río de Janeiro posee un moderno aeropuerto internacional, que recibe vuelos del país y el exterior. Además dispone de una excelente red hotelera.

En primer plano, el cerro Pan de Azúcar.