Espectáculos callejeros

En Rosario, "capital del lenguaje", un desconocido mimo logró rodearse de un numeroso público, en la esquina de San Martín y Córdoba, para brindar sin palabras un espectáculo de buen gusto para todas las edades. Sin groserías y sin faltarle el respeto a nadie, divirtió por largo rato a grandes y chicos con sus gestos y movimientos, demostrando con gran habilidad cuánto se puede hacer para que la gente hoy sufriente sonría y se divierta sanamente sin apelar a la insolencia o incorrección. Por merecer el honor de "capital del lenguaje", sugiero con el mayor respeto, a quienes corresponda, que se controle debidmente la calidad de los espectáculos que se brindan en las peatonales para que cumplan con la misión que les corresponde y que es estar al servicio de la cultura y no de lo contrario...

Alberto Gershanik