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 domingo, 05 de octubre de 2003

Rally mundial: Loeb se impuso en San Remo

San Remo, Italia.- Sébastien Loeb (Citroën Xsara) ganó el rally de San Remo, Italia, undécima de las catorce pruebas del campeonato del mundo de la especialidad, tras disputarse el último tramo especial, este domingo de tarde.

El piloto francés aventajó a su compatriota Gilles Panizzi (Peugeot 206), al estonio Markko Martin (Ford Focus) y al español Carlos Sáinz (Citroen Xsara), obteniendo así la tercera victoria de la temporada, cuarta de su carrera, en una prueba con un final palpitante.

"La alegría de este día está a la misma altura de los temores", afirmó Loeb. La lluvia en efecto perturbó los últimas dos especiales. Unicamente Panizzi, oriundo de la región, supo "leer" en el cielo, calzando neumáticos para tales circunstancias. El piloto de Peugeot aprovechó para efectuar una remontada espectacular.

Entre racionalidad y las ganas de hacer algo grande, Panizzi no dudó. Eligió neumáticos para lluvia, y fue la buena opción. "Me dijeron que llovería durante los dos especiales, y, por lo tanto puse gomas mixtas" dijo con sencillez Panizzi.

En dos tramos cronometrados, en menos de 50 km, el piloto de la marca del león puso la situación de su lado, al pasar a Carlos Sáinz (Citroen Xsara) y después a Markko Martin, quedando finalmente a menos de 30 segundos de Loeb.

Al mismo tiempo, Marcus Gronholm (Peugeot 206) cometió un error y se vio obligado a abandonar.

Si Loeb pudo resistir a Panizzi, no fue el caso de Martin, el cual cedió el segundo puesto.

"Viví el momento más difícil antes de largar los dos últimas especiales, indicó posteriormente Loeb. Fue algo muy angustiante, terrible. No podía creer el no haber pensado en la cuestión de los neumáticos, sobre todo cuando salí de la asistencia y vi a lo lejos que estaba por completo negro, anunciando tormenta", afirmó.

"También fue angustiante, confió luego Loeb, porque sabía que con las gomas 'slicks' bajo lluvia el auto es incontrolable".

Pero, Loeb desconfiaba de Martin, no mucho de Gronholm y menos aún de Panizzi con quien la diferencia era más importante. "Sabía antes de poner mis neumáticos que Panizzi había hecho otra elección. Pero estaba a 1 minuto y 45 segundos y creíamos que no podría recuperarlos. Nunca pensamos que pudiera ser tan peligroso", aseguró el vencedor.

El británico Richard Burns (Peugeot 206), aprovechando las desventuras de Gornholm, heredó el séptimo lugar, lo que le permite conservar el liderazgo del campeonato del mundo de pilotos, con dos puntos de ventaja sobre Loeb.

Con dos rallys sobre asfalto en el programa del mes de octubre (Córcega y Cataluña), antes del final en Gran Bretaña (7 al 9 de noviembre), Sébastien Loeb parece bien ubicado en la carrera por el título frente a Burns y Sáinz.

Por otra parte, Citroen tomó el mando del Campeonato de constructores, por delante de Peugeot.

(AFP)

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