| miércoles, 10 de septiembre de 2003 | Herencia sin admisión Es ésta una herencia muy antigua transmitida a los santafesinos que la toleraron por años y años y que los sucesivos gobernadores no le prestaron mucha atención porque parecía no molestar mucho. Se refiere a un sistema policial con aceptación progresiva de delitos que alteraron la paz de los pueblos y que en estos últimos años tomaron conocimiento público gracias a los informes de los periodistas y comunicadores, con páginas completas de diarios, charlas radiales y programas de televisión. Y hasta tal punto se llegó que se supone que la policía rebalsó el sistema. Creería que el mayor porcentaje de quienes pertenecen a la fuerza policial aceptaría con agrado el final de esa parte criticable de su misión, como la de obtener dinero a cambio de pactos con casos ilegales y se sentirían aliviados por no manejar las famosas "cajas negras", porque se supone que estudian para ser policías que deben combatir a los que delinquen y limitarse a defender a una sociedad que necesita de ellos y... mucho. Entonces, nada más apropiado que una mutua ayuda y colaboración entre la autoridad y el pueblo. ¿Por qué no hacer un cambio total? ¿Por qué tolerar un sistema corrupto?
Haidé Z. de Garello enviar nota por e-mail | | |