Ibarra y Macri retornaron a la gimnasia del golpe a golpe

Aníbal Ibarra y Mauricio Macri dejaron ayer de lado los buenos modales que intentaron exhibir antenoche en el debate televisivo y volvieron a atacarse, mientras que el presidente Néstor Kirchner reapareció en la campaña para renovar su respaldo al jefe de Gobierno porteño y cuestionar al entorno del candidato de Compromiso para el Cambio.

Kirchner volvió a incursionar en la campaña previa al ballottage y aseguró que tiene "diferencias circunstanciales" con figuras del entorno de Macri, como el ex diputado Miguel Angel Toma y el ex viceministro del Interior Cristian Ritondo, hecho que el presidente de Boca aprovechó para ironizar con que Ibarra "siempre buscó colgarse de alguna pollera".

"Cuando uno mira el espacio de Macri, no solamente mira quién va de candidato a jefe de la ciudad. Toma, Ritondo..., hay un montón de gente con la que tengo diferencias circunstanciales", aseveró el presidente.

En tanto, Ibarra y Macri aprovecharon cada micrófono para volver a atacar a su adversario. En Villa Lugano, el frepasista aseguró que Macri "vive en una burbuja" y que, por eso, al sumarse a una competencia electoral "empezó a ver cosas que uno siempre conoció y que, con el esfuerzo del Estado, está intentando resolver".

"Macri habla de la situación social desde un lugar de campaña, pero no tuvo sensibilidad social cuando despidieron a miles de trabajadores del Correo ni cuando afirmó que había que meter presos a los cartoneros", sostuvo Ibarra.

Respecto al resultado del debate, el jefe de Gobierno porteño insistió en que el presidente de Boca no conocía "nada" de su vida ni él de la de Macri, y ratificó que nunca se había cruzado "ni con su padre ni con sus amistades".

De esta manera, Ibarra volvió al contrapunto que abrió Macri cuando relató como "anécdota" una cena que habrían compartido meses atrás en la casa de su padre, Francisco, organizada por la Embajada de Francia, tras un viaje a ese país que habían realizado juntos, invitados como jóvenes líderes latinoamericanos.

Por su parte, Macri acusó a su rival en el ballottage del próximo 14 de "haber estado tres años en el cargo" y no haber podido "hacer nada" en la ciudad, y lamentó que en el debate su adversario se haya dedicado a "proponer todo por segunda vez, como si no hubiera estado en el gobierno".

En la misma línea, el empresario fue aún más allá: "Ibarra es un hombre que no para de mentir". También se refirió al renovado apoyo del presidente Kirchner a la candidatura de Ibarra y bromeó con que su rival "siempre busca colgarse de alguna pollera", mientras en cambio él, "solito", se presenta "como una alternativa".