Resolución en el juicio por el crimen del músico Mariano Witis

Le dan ocho años de cárcel a un cabo que fusiló a un rehén

El suboficial resultó absuelto por el asesinato de un adolescente de 16 años. Elfallo fue considerado insuficiente y prejuiciosa por los familiares de las víctimas

Buenos Aires.- Un suboficial de la policía bonaerense fue condenado ayer a ocho años y medio de cárcel en un juicio oral por el crimen del músico Mariano Witis cuando era llevado como rehén, durante una persecución tras un asalto a un banco ocurrida el 21 de setiembre de 2000.

El cabo Emir Champonois, del Comando de Patrullas de San Fernando, fue condenado por el Tribunal Oral 3 de San Isidro por el delito de homicidio simple, mientras que fue absuelto por la muerte de Darío Riquelme, de 16 años, baleado por él en el mismo hecho.

El fallo unánime de los integrantes del tribunal, Marcelo García Helguera, Ezequiel Igarzabal y Carlos Vales Garbo, fue calificado de insuficiente, incriminatorio y prejuicioso por los familiares de ambos fallecidos, quienes desde el día del hecho reclamaron justicia en forma conjunta.

La representación unificada de las familias de las víctimas, a cargo de abogados del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) anunció al término del veredicto que apelará a todas las instancias superiores, incluso en el exterior.

El fiscal del juicio oral, Alfredo Frutos, y los abogados de la querella Laura del Cerro y Rodrigo Borda habían solicitado la pena de 20 años de prisión por el delito de homicidio simple, reiterado en dos casos, pero el tribunal entendió que Champonois fue culpable de uno solo y por "dolo eventual".

La sentencia fue esperada en la puerta del tribunal por gran cantidad de personas que manifestaron con cánticos y aplausos de repudio su disconformidad y luego consolaron a los padres de Witis y Riquelme, que con los ojos llenos de lágrimas se retiraban de los tribunales de Ituzaingó 340.

El hecho por el que se juzgó al policía ocurrió en la mañana del 21 de setiembre de 2000 en el partido de San Isidro, cuando dos delincuentes armados interceptaron el automóvil Volkswagen Gol azul conducido por su propietaria Julieta Schapiro, a quien acompañaba su amigo Witis.

Con los dos rehenes en su poder, los captores se dirigieron en el auto a una sucursal del banco Itaú, donde los cuatro ingresaron y los asaltantes amedrentaron a clientes y empleados y robaron el dinero de las cajas.

Irradiada el alerta policial, un patrullero del Comando de Patrullas de San Fernando en el que viajaba Champonois comenzó a perseguirlo hasta que en la entrada de una villa de emergencia el auto, con escopetazos en dos de sus ruedas, se detuvo. En ese momento, uno de los delincuentes armado con una escopeta se bajó y a la carrera se perdió entre los pasillos del asentamiento. El cabo Champonois se bajó del patrullero y empuñando su pistola calibre nueve milímetros se acercó al auto hasta que a unos tres metros de distancia disparó y mató a balazos primero a Riquelme y luego a Witis.

El tribunal consideró probado en su fallo que al momento de alertar a los patrulleros, la policía estaba convencida que quienes huían eran cuatro delincuentes -tres varones y una mujer-, con armas largas.

Respecto de Witis, los jueces entendieron que el cabo Champonois disparó con "indiferentismo" (sic)hacia el interior del vehículo, donde creía que había otros dos delincuentes pero sin ver qué ocurría con ellos ya que tenía vidrios polarizados. (Télam)

Los familiares criticaron el fallo judicial.