| sábado, 06 de septiembre de 2003 | Rumbo a Alemania 2006 Todos contra todos es mejor Argentina siempre vio simplificado su clasificación a los mundiales jugando por este sistema Desde que las eliminatorias comenzaron a jugarse con el sistema de todos contra todos, el camino a las copas del mundo se simplificó para el seleccionado argentino, que con esa forma de disputa logró siempre el primer lugar y clasificó con antelación, dejando de lado el padecer que acompañaba al equipo en cada camino previo al Mundial.
Históricamente las eliminatorias habían sido complicadas para los seleccionados argentinos, que protagonizaron angustiosas clasificaciones y algunas dolorosas caídas que lo llevaron a quedar fuera de una Copa del Mundo, como en México 1970.
Otro ejemplo fue cuando estuvo al borde del precipicio al tener que jugar un repechaje ante Australia, como sucedió en la ruta a Estados Unidos 1994.
Por más que el adversario contemporáneo sea Colombia -a partir de la inolvidable derrota de 1993 por 5-0-, Perú es un durísimo rival histórico para Argentina.
Los peruanos dejaron fuera al seleccionado argentino del Mundial de México 1970 y estuvieron a 9 minutos de hacerlo para el otro realizado en tierra azteca, el de 1986, en ambas oportunidades en Buenos Aires.
El derrotero en las eliminatorias se inició en 1957, con vistas a lo que sería la primera gran humillación internacional del fútbol argentino en Suecia 1958.
El equipo nacional superó con relativa facilidad a Chile y Bolivia teniendo como entrenador a Guillermo Stábile y como jugadores destacados a Carrizo, Musimessi, Dellacha, Corbatta, Rossi, Mouriño, Infante, Menéndez, Sanfilippo, Labruna y Zárate.
Como datos anecdóticos de esa ocasión se destacan las declaraciones de Angel Labruna, tras perder 2-0 ante Bolivia en La Paz. "La altura es mucho handicap, porque no podemos correr como en Buenos Aires", afirmó el emblemático jugador de River.
En 1960 se jugaron las eliminatorias para Chile 62 y Argentina eliminó a Ecuador por 6-3 (de visitante) y 5-0 (como local).
El entrenador era Victorio Spinetto, reemplazado por Juan Carlos Lorenzo en la Copa del Mundo, y algunos de los futbolistas que tomaron parte fueron Roma, Simeone, Navarro, Rattín, Sacchi, Corbatta, Pando, Sosa, Sanfilippo y Belén.
En 1965 el equipo logró el pasaporte para la Copa del Mundo de Inglaterra, aunque la representación que eliminó a Bolivia y Paraguay, dirigida por José María Minella, jugó realmente mal y se clasificó porque sus rivales eran, simplemente, peores.
Sin embargo en ese plantel hubo grandes jugadores como Roma, Ramos Delgado, Ferreiro, Rattín, Albretch, Bernao, De la Mata, Mas y Artime.
Perú y su estigma aparecieron en el camino argentino en 1969, postergando la presencia del seleccionado en México 70.
Esa eliminación, la primera, llegó como consecuencia de un encadenamiento de falencias de los dirigentes y por el bajísimo nivel de funcionamiento del equipo.
El entrenador Adolfo Pedernera, que sustituyó días antes del comienzo del torneo a Humberto Maschio, contó con nombres de notable nivel como Cejas, Gallo, Suñé, Basile, Marzolini, Cocco, Rattín, Yazalde, Rulli, Brindisi y Daniel Onega, pero, según lo reflejan las crónicas de la época, jamás tuvo un equipo.
El grupo se completó con los infaltables bolivianos, quienes vencieron a Argentina 1-0 en el primer partido del grupo jugado en La Paz, que culminó con una gresca entre los jugadores argentinos y un grupo de agresivos policías.
Perú, con la dirección técnica del Didí, superó a los argentinos en Lima 1-0. El equipo de Pedernera le ganó luego como local a Bolivia por 1-0 (penal convertido por Albretch).
El 31 de agosto de 1969, en cancha de Boca, Perú eliminó a Argentina del Mundial, al empatar 2 a 2 con goles de Cachito Ramírez para los incaicos.
El cotejo fue dramático y lo igualó Alberto Rendo en el último minuto. En tiempo de descuento parecía que se producía el milagro, pero el árbitro chileno Rafael Hormazábal anuló un gol de Angel Marcos por falta de Héctor Yazalde sobre el arquero peruano Rubiños.
Para el Mundial de Alemania 74 no hubo sobresaltos. La Argentina eliminó a Paraguay y Bolivia, con siete puntos logrados sobre ocho en juego.
Enrique Omar Sívori era el técnico y la base de ese equipo fueron Carnevali, Wolf, Bargas, Heredia, Brindisi, Telch, Babington, Ayala, Guerini y Kempes.
Lo que aparentaba ser una sencilla excursión para llegar a México 86 -nadie esperaba otra cosa con Diego Maradona jugando con la casaca celeste y blanca- se convirtió en un paseo en el "tren fantasma", nuevamente por obra y gracia de Perú.
Argentina ganó los ocho puntos ante Colombia y Venezuela (sendas victorias de local y visitante en ambos casos), pero perdió en Lima (0-1 gol de Oblitas).
Los peruanos ganaban 2-1 en cancha de River y Argentina, con Diego, Passarella, Valdano, Burruchaga y Giusti, volvía a quedar afuera de un Mundial, casualmente a jugarse en México y otra vez ante el seleccionado peruano.
Pero una "corajeada" de Daniel Passarella, a nueve minutos del final, fue transformada en gol por Ricardo Gareca sobre la línea, y el delirio se desató en el estadio Monumental.
Lo último y más doloroso fue el "cachetazo" de Colombia en 1993, en un grupo en el que también jugaban Perú y Paraguay.
El equipo de Basile, bicampeón de América y con más de 30 partidos sin derrotas, cayó por 5-0 ante Colombia y debió jugar dos partidos con Australia, con la urgente convocatoria de Maradona, para ir a EEUU 94.
La eliminatoria para Francia 98 fue maratónica, fue la primera que se jugó todos contra todos a dos ruedas, quedando ajeno a ella Brasil al haber sido campeón en EEUU.
Argentina, con la dirección técnica de Daniel Passarella, ganó el grupo tras jugar 16 partidos (8 triunfos, 6 empates y 2 reveses) y sumar 30 puntos, seguido por Paraguay con 29, Colombia con 28 y Chile con 25.
El equipo nacional se clasificó con bastante holgura y sólo perdió ante Bolivia (en La Paz) y Ecuador (Quito), en ambos casos en la altura.
Por último, en el camino al fracaso de Japón-Corea 2002, con la conducción técnica de Bielsa, Argentina se clasificó faltando cuatro fechas tras vencer a Ecuador en Quito.
De los 18 cotejos ganó 13 y sólo perdió uno (1-3 ante Brasil en San Pablo). Al único adversario que no pudo vencer fue a Paraguay, con el cual igualó los dos partidos. (Télam) enviar nota por e-mail | | Fotos | | Ermindo Onega ante Bolivia, previo al Mundial 66. | | |