| sábado, 16 de agosto de 2003 | Recuperar el rumbo Central recibe a los funebreros tras la goleada en la Boca El debut, no sin suspenso, de Claudio González (ver aparte) seguramente le dio a Miguel Angel Russo bastante de tranquilidad. Es que Rosario Central aún no puede superar la partida de Luciano Figueroa y César Delgado y no hay tiempo para lamentos. Si bien el debut en el Apertura fue exitoso, la imagen dejada ante Boca donde su equipo no le hizo cosquillas a Abbondanzieri fue para preocuparse. Hoy Chacarita lo pondrá a prueba nuevamente y el técnico espera que con el Yerbatero sea otra cosa.
Dos apariciones de Ezequiel González y un primer tiempo donde se mostró ambicioso, le bastaron a Central en el primer partido del campeonato frente a Vélez para empezar con el pie derecho. Claro que a la fecha siguiente sucumbió sin atenuantes frente a Boca, que seguramente peleará el título. Y más allá de que aguantó bien la primera mitad, lo cierto es que jugó siempre muy lejos del arco rival y prácticamente no contó con situaciones, a la vez que se desmoronó tras el 1-0 xeneize.
Esa realidad del último encuentro en la Bombonera es la que deberá revertir Central y para ello contará con un hombre en el que Russo tiene puestas muchas expectativas. Si bien el entrenador se cuida mucho de recordar a Lucho y al Chelito, es más consciente que nadie de que sin ellos el gran problema auriazul es la pérdida de potencia ofensiva.
Por eso si bien Claudio González no será la solución a todos los problemas en ese aspecto, ayudará a atenuarlos con sólo mantener el gran nivel que exhibió en su paso por Talleres de Córdoba en la temporada pasada.
A su lado volverá a estar Gonzalo Belloso, ya que si bien Germán Herrera se recuperó de una molestia física, se ve que Russo no cree que está para jugar los noventa minutos y prefirió dejarlo en el banco. La producción del Pejerrey, como la de Mauro Poy o la de Javier Cámpora cuando ingresó, distó mucho de ser productiva, ya que encima quedó innumerables veces en posición adelantada. Pero el técnico no tuvo muchas opciones para decidir y relegó a Poy y Cámpora (ayer estuvo con vómitos y no se sabe si jugará) a la reserva.
Chacarita llega al Gigante entonado y con nuevas figuras, con una delantera (Müller y Claudio Graf) que nunca usó en este Apertura y que promete un mayor peso ofensivo. El equipo no está confirmado (ver página 3) pero sí tendrá al menos tres cambios. Seguramente será un hueso duro de roer y de superar este obstáculo Central podrá encarar una nueva etapa de madurez. enviar nota por e-mail | | Fotos | | El Yerbatero será una de las cartas de ataque. | | |