Casilda. - Con el propósito de apoyar a las instituciones que atienden la salud pública casildense se conformó una fundación civil sin fines de lucro que provisoriamente funcionará en la vecinal del barrio San Carlos. La Fundación para la Salud, integrada por médicos y representantes de entidades locales, tendrá como prioridad ayudar al hospital San Carlos y a los dispensarios que funcionan en la ciudad, y también organizará talleres de educación sanitaria y fomentará ámbitos de discusión científica.
La flamante institución está gestionando su personería jurídica y prevé generar recursos mediante la colaboración económica de socios y donaciones monetarias o de bienes por parte de empresas y particulares. Los fondos serán destinados fundamentalmente a la compra de insumos y de tecnología para mejorar el funcionamiento de la salud pública local. La fundación recibió inicialmente de la Municipalidad unos tres mil pesos que fueron depositados en garantía.
La entidad cumplirá una función clave para el sostenimiento del hospital ya que, en alguna medida, cubrirá el vacío que dejaran sus antiguos cooperadores cuando renunciaron en pleno por diferentes problemas.
Como la cooperadora
La cooperadora del nosocomio casildense está acéfala desde hace años porque la renovación de sus autoridades implicaría para la nueva comisión heredar y afrontar una serie de cuestiones judiciales irresueltas. El problema es tan complejo que está en manos del área de Jurídicas del Ministerio de Salud.
"Esta fundación será reconocida como el único ente representativo de apoyo al hospital", dijo sin rodeos el director del efector público casildense, Luis Ortega, tras recordar los problemas que dejó la última cooperadora hospitalaria. "Es un orgullo para la comunidad -añadió- contar con una entidad que trabajará para ayudar a resolver los problemas que tiene la salud pública local".
Por su parte, el presidente de la fundación, Roberto Calcaterra, recordó que este proyecto surgió hace un tiempo cuando en el entonces consejo de salud casildense "se discutía la necesidad de tener una institución que aunara esfuerzos para mejores los servicios de sanidad pública de la ciudad, como dispensarios y hospital".
"El objetivo que perseguimos es amplio", remarcó Calcaterra y manifestó que las prioridad es la adquisición de aparatología y medicamentos. "Creemos -sostuvo el médico- que a través de la fundación podremos conseguir mejores precios en insumos y obtener otros beneficios".