El ex árbitro Javier Castrilli volvió a controlar ayer un superclásico, aunque en este caso desde un lugar menos expuesto como lo es el Centro de Operaciones del Departamento Central de Policía, desde donde monitoreó el partido a partir de su inminente asunción como responsable de la seguridad en el fútbol.
Allí estuvieron junto a Castrilli el nuevo secretario de Seguridad interior, Norberto Quantín, el jefe de la Policía Federal, comisario general Roberto Giacomino, el superintendente de Seguridad metropolitana, comisario Alberto Capuchetti, y el director general de Operaciones, comisario mayor Daniel Vigliano.
Por otra parte se efectuó una prueba piloto impulsada por el ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, que consistió en la instalación de dos centros de asesoramiento y denuncias en las inmediaciones del estadio de Boca.
Un cuerpo de abogados, personal de la fiscalía contravencional y de la penal de La Boca evacuaron las dudas de los hinchas y los asistieron ante hechos de violencia. (Télam)
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La Ciudad
