Boca Juniors, que dio anoche en La Bombonera otra muestra de su oficio para afrontar partidos decisivos, dejó atrás al Cobreloa al ganarle 2-1 y se clasificó semifinalista de la Copa Libertadores, al tiempo que se prepara para recibir a River Plate, pero sólo en el marco de la lucha por el título en el torneo Clausura.
El equipo argentino fue contundente al principio y sacó ventaja con los goles de Matías Donnet y Carlos Tevez, pero los chilenos descontaron en ese primer período por un acierto de Patricio Galaz.
Boca se impuso por el mismo resultado que prevaleció en el escenario del desierto de Calama y en la próxima etapa tendrá por adversario al América de Cali, el conjunto caleño que acaba de eliminar a River.
Boca Juniors pareció tener todo resuelto en quince minutos, pero luego tuvo que pasar por algunas complicaciones.
A los 7 minutos combinaron Tevez y Guillermo Barros Schelotto, el Apache recibió la devolución frente a Nelson Tapia y tocó hacia el medio para que Matías Donnet convirtiera sin oposición.
A los 14, un toque de Diego Cagna se encontró otra vez con el pique de Tevez (en posición adelantada no sancionada) y el talentoso jugador se fue solo hasta enfrentar a Tapia y lo superó con un preciso toque al palo derecho.
Hasta entonces Cobreloa ni pasaba de tres cuartos de cancha, Boca imponía la presión y con el gran momento de Tevez le alcanzaba para marcar la diferencia.
Pasados los 20 minutos el equipo argentino bajó el ritmo, el dominio de la pelota quedó más repartido y creció la figura de Fernando Martel, quien ubicado sobre la derecha hizo prevalecer su buen manejo.
Hubo un penal no cobrado de Rolando Schiavi contra Patricio Galaz a los 16 minutos y pese a que los chilenos distaban de llegar con frecuencia al área de Roberto Abbondanzieri consiguieron el descuento a los 26'.
La acción clave la comenzó Martel con un toque para Galaz, el delantero pisó en diagonal, dejó atrás a Diego Crosa y antes de que lo cerraran Schiavi y Pablo Jerez, y definió con un remate muy ajustado al palo izquierdo ante la impotencia del arquero xeneize.
Boca volvió a manejar la situación en el último cuarto de hora, aunque dejó la sensación de estar más tranquilo de lo aconsejable ya que el primer tiempo se cerró por diferencia mínima.
Cobreloa salió a jugar el segundo capítulo con una mayor dosis de agresividad, pero el ímpetu le duró no más allá de los 10 minutos. Una vez cumplido ese lapso los mediocampistas de Boca volvieron a adelantarse en el campo y a cubrir de mejor manera los espacios.
El juego se hizo aburrido porque Boca mantuvo a los chilenos lejos de su área, pero en las replicas dejó de generar peligro.
Tevez y Barros Schelotto quedaron demasiado separados y además el chico de Fuerte Apache entró en una guerrilla de roces con sus marcadores que lo perjudicó a él y a su equipo.
Cobreloa estuvo cerca del empate una vez, a los 26', cuando Jaime González peinó en el primer palo un córner de Martel desde la izquierda, pero salvó Clemente Rodríguez en la boca del arco cuando el Pato Abbondanzieri había quedado descolocado.
En los últimos minutos el conjunto dirigido por Carlos Bianchi se limitó a recurrir al control de pelota y terminó redondeando una victoria que de ninguna manera fue lucida, pero que sí mostró su oficio para resolver este tipo de partidos.
Ahora Boca deberá dirimir la semifinal con América de Cali, una serie que comenzará en la Bombonera y se definirá en el estadio Pascual Guerrero.
| |
La Ciudad
