El intendente Hermes Binner se sumó ayer al reclamo de colectiveros y taxistas ante la ola de robos y violencia que sacude a la ciudad. "A veces, cuando uno recorre a la noche, no encuentra presencia policial. Este tema nos preocupa a todos y se necesita más presencia preventiva", enfatizó el jefe comunal. Su secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza, consideró que el "pico de inseguridad es directamente proporcional a la presencia o no de efectivos". Casi como una excusa, el delegado local del Ministerio de Gobierno provincial, Diego Giuliano, admitió que aún no llegaron los 200 patrulleros prometidos a principios de año, pero aseguró que "la iluminación y la poda de árboles también son condiciones de seguridad".
Binner aprovechó el lanzamiento de un ciclo de cine promovido por la Intendencia para agendar la seguridad como tema prioritario. "Sin duda esto nos preocupa a todos. Siempre aspiramos a que haya más seguridad en la calle, mayor control policial", indicó. Luego fue más explícito y apuntó a la falta de uniformados en la vía pública. "A veces uno recorre la noche y no encuentra presencia policial, se necesita una presencia preventiva", enfatizó.
Los últimos hechos de robo y vandalismo cometidos a bordo de colectivos y taxis lanzaron el alerta en el Palacio de los Leones. Ayer, y tras haberse desarrollado antenoche un encuentro entre transportistas, funcionarios y empresarios con la cúpula policial, Zabalza volvió al tema.
"En las asambleas barriales escucho preocupación por la disminución de móviles y policías, y por reiterados incumplimientos entre lo que se ha pactado entre vecinos y lo que se prometió en su momento", se explayó Zabalza, para quien "este pico de inseguridad es directamente proporcional a la presencia o no de efectivos en la vía pública".
Desde Gobierno provincial, Giuliano admitió que la acción preventiva policial resulta "imprescindible", pero renglón seguido contraatacó: "La iluminación y la poda de árboles también responden a políticas de seguridad y no son exclusivas de la fuerza policial".
Zabalza insistió en los esfuerzos que hace el municipio por prevenir delitos "En materia de luces, bacheo y escamonda tenemos un plan y lo estamos poniendo en marcha", afirmó, al tiempo que estimó "necesario atender urgencias que plantean los vecinos", amenazados por la inseguridad.
Aunque Giuliano destacó que los programas de seguridad ciudadana son "cada vez más numerosos y con activa participación de la gente", también reconoció que aún no ingresaron nuevos policías a la Unidad Regional II y tampoco se concretó la incorporación de 200 patrulleros, prometida a comienzos de año.
Robos dentro del promedio
En Rosario la fuerza policial cuenta con 4 mil hombres, pero con la emergencia generada por las inundaciones en Santa Fe se trasladaron efectivos a la capital provincial. Sin embargo, Giuliano aclaró que ya regresaron a la ciudad y señaló que si no se hiciera tarea de prevención "Rosario padecería índices delictivos de mayor envergadura, mientras que en estos últimos 10 días los robos fueron similares a la media anual".
Sin embargo, la preocupación existe. Por eso, y tras la reunión que se desarrolló el martes pasado en Jefatura, el subsecretario de Servicios Públicos municipal, José León Garibay, remitió un plano a las autoridades policiales con las zonas rojas donde los colectiveros son asaltados y golpeados. "Queremos evitar la reducción o eliminación de los servicios en zonas como Seguí y Provincias Unidas, u Oroño y Uriburu", puntualizó.