Asesinaron a balazos a un cardiólogo en un presunto crimen por encargo

El presidente de la Fundación Cardiológica Argentina apareció muerto de cuatro balazos en su consultorio

Buenos Aires.- El presidente de la Fundación Cardiológica Argentina, José Martínez Martínez, fue asesinado de cuatro balazos a quemarropa en su consultorio del barrio de Recoleta y los investigadores sospechan que se trató de un crimen por encargo por motivos ligados a su profesión.
El cadáver del cardiólogo, quien también era jefe y fundador de la Unidad Coronaria del Hospital de Clínicas, fue hallado antenoche, cerca de las 23.30, en el consultorio del primer piso de Junín 1276.
Martínez Martínez, de 56 años, estaba boca abajo en una camilla de su consultorio y tenía cuatro balazos, uno en el pecho, dos en la espalda y uno en la nuca, todos disparados a corta distancia.Además el homicida le amarró los pies con una cinta, pero de manera "muy burda".
Según la autopsia, Martínez Martínez fue asesinado entre las 14 y las 20 de anteayer, aunque recién a las 23.30 su cadáver fue encontrado por su hija, quien fue a buscarlo porque estaba preocupada al no tener noticias suyas.
"No hay explicación lógica para lo que ocurrió. Era un hombre de una conducta intachable y muy clara, tanto en lo personal como en lo profesional y familiar", dijo el director del Hospital de Clínicas Hermes Pérez, quien informó que el cardiólogo vivía con su mujer y sus tres hijos.
Hace aproximadamente dos meses Martínez Martínez fue víctima de un asalto en su casa de avenida Independencia 2014, cuando fue interceptado por delincuentes que lo obligaron a entrar al domicilio para robarle. Pero la policía no cree que haya relación entre ese hecho y el crimen y orienta la pesquisa hacia un móvil vinculado con su actividad en la medicina.
La policía, junto al fiscal de instrucción porteño Guillermo Gamboa, intentaba establecer los motivos por los cuales el cardiólogo estaba en su consultorio, ya que atendía allí los lunes, miércoles y viernes y por eso, ayer, en el lugar no estaba su secretaria privada.
Colegas de la víctima mencionaron la oposición que el médico mantenía desde hace tiempo respecto a una técnica de reanimación cardiológica que pugna por imponerse en el país y que consiste en la implementación de cadiodesfibriladores.
"En este momento existe una corriente que apoya ese método de reanimación, pero Martínez Martínez se oponía. El creía que era mejor instruir a la sociedad en técnicas de reanimación manuales, como los masajes cardíacos y la respiración boca a boca", explicaron.
El profesional dijo que descree de esa versión, aunque admitió que el negocio que implica la aplicación de esa técnica en el país es millonario.
"Aquí esos aparatos se usan tanto en unidades de emergencia coronaria como en las guardias de los hospitales. Pero una ampliación del uso puede significar muchos millones de dólares en la venta de esos equipos", manifestó Pérez. (Télam)