Para Walter Silvani tampoco fue fácil encontrarle una explicación al empate. Es más, al igual que el Bambino Veira, el Cuqui está convencido de que la suerte no está del lado de Newell's, por eso no dudó en argumentar que al equipo "lo persigue la fatalidad. Estamos con mucha bronca y muy decepcionados porque no logramos el resultado, pero el equipo jugó bien y eso es alentador para los partidos que restan. Ojalá la suerte empiece a estar de nuestro lado". "Jugamos un buen fútbol, pero está claro que no se nos dio el resultado, de todas maneras el balance no es tan negativo si nos ponemos a pensar que le descontamos un punto a los equipos (Colón y Racing) que pelean con nosotros por entrar a una copa internacional. Hubiese sido mucho peor haber jugado un desastre faltando muy pocas fechas para que finalice el campeonato", destacó el atacante rojinegro. Varios de los integrantes del plantel leproso adujeron que Gimnasia se aferró al envío de centros y que eso los perjudicó, pero si quedó algo en claro fue que el principal responsable del resultado fue Newell's por no haber sabido definirlo antes. "Algo de eso hay, tuvimos muchas chances para convertir y no las aprovechamos. En algunas definimos mal y en otras fue increíble lo que pasó porque la sacaron en la línea", agregó el Cuqui. "En lo que va del torneo tuvimos muchos partidos buenos y este fue uno de esos. El equipo tuvo variantes, llegamos por los dos costados, por el medio y creo que futbolísticamente hicimos todo para ganarlo", sentenció. Otro punto en lo que coincidieron la mayoría de los jugadores es que "no hay tiempo para ponerse mal y los puntos que perdimos acá hay que ir a buscarlos a Bahía Blanca la próxima fecha".
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