River Plate ofreció una actuación convincente en suelo brasileño y su juego le permitió derrotar con autoridad a Corinthians por 2 a 1, resultado que le dio la clasificación para los cuartos de final de la Copa Libertadores de América. Y en esta próxima instancia, los dirigidos por Manuel Pellegrini se verán las caras con los colombianos de América de Cali, quienes el martes habían dejado afuera a Racing. En el histórico estadio Morumbí de San Pablo, ante 70 mil hinchas paulistas, el conjunto millonario dominó el partido de principio a fin y sometió a su rival con claridad, gracias a las conquistas logradas por Martín Demichelis y Esteban Fuertes, éste de penal. Corinthians, que jugó más de un tiempo con diez hombres (y terminó el partido con nueve), se había puesto en ventaja a través de Liedson, cuando no había hecho demasiado como para justificar esa diferencia. River, que había ganado el partido de ida por 2 a 1 y por eso contaba con la ventaja de que con sólo empatar seguía en la Copa. Pero en ningún momento demostró que iba a intentar aprovecharse de ello. El equipo de Núñez ingresó a la cancha con el ánimo templado y controló la pelota en los primeros minutos pero, de todos modos, a los 8' ya se encontraba en desventaja. Liedson, con un cabezazo al palo derecho, abrió el marcador en la primera llegada del equipo brasileño, aprovechando una mala salida de Buljubasich y la falla en las marcas de los defensores millonarios. Pero River mantuvo la línea de juego. De a poco se sobrepuso al contexto adverso, la aspereza del juego, las provocaciones del rival y recuperó la iniciativa. En ese tramo, Andrés D'Alessandro y Eduardo Coudet fueron los pilares del mediocampo, que prevaleció ante el tibio fútbol de Corinthians, que sólo comprometió al arquero José María Buljubasich con los centros lanzados por Rogerio. La merecida igualdad se cristalizó a los 21' cuando Demichelis, también con un cabezazo, mandó al fondo del arco una pelota que llegó al área gracias a un tiro libre ejecutado por el Chacho Coudet. Los jugadores de Corinthians asimilaron el golpe y algunos exhibieron síntomas de nerviosismo. Una muestra clara de ello fue sobre el final de la etapa inicial, cuando los dueños de casa se quedaron con uno menos por una fuerte infracción sobre D'Alessandro, a quien no pudieron controlar. El talentoso volante fue derribado por Roger (expulsado por esa acción) y luego pateado desde el piso por Leandro. Lo que originó de inmediato un tumulto que le dio tono dramático al epílogo. Bajo el aliento permanente de la torcida brasileña, River extendió su hegemonía en el complemento, aún con mayor comodidad que en la etapa inicial. Fernando Cavenaghi, a los 9', pudo aumentar la ventaja en un mano a mano frente al arquero Doni pero falló en el remate. También Víctor Zapata, a los 22', cuando desperdició otra chance (sacó un remate desviado) en una jugada que River pudo definir en más de una oportunidad. Hasta que el triunfo quedó asegurado a los 29': Fuertes, de tiro penal, marcó el segundo con un disparo al palo derecho. Una pelota tocada con la mano por Luciano había dado origen a la pena máxima. Entonces, en los últimos quince minutos, River supo administrar el juego sin sufrir sobresaltos en su área. Y por eso se abrazó a la victoria, la primera que el equipo millonario obtiene en Brasil en su larga historia en la Copa. Y que le sirvió para seguir adelante. Ahora será el turno de eliminar a América de Cali, primero en el Monumental y después sí definiendo la llave en Colombia. Como para que se repita lo de anoche.
| |