El asalto que sufrió la portavalores de Tersuave tiene significativas coincidencias con otros dos robos a empleados de la mayorista de alimentos Rosental. En los tres casos los trabajadores fueron sorprendidos en sus rutas habituales, cuando se detuvieron en semáforos, por dos motociclistas armados. Los asaltantes circulaban en motos tipo enduro color blanco y amarillo y exigieron el dinero mencionando el sitio exacto en el que era transportado. Las víctimas fueron intimidadas con armas de fuego y, en uno de los casos, los maleantes no dudaron en disparar.
El primer caso ocurrió el 31 de diciembre pasado. Juan, empleado de Rosental, salió de la empresa en Mendoza y Wilde rumbo al centro. Contra su rutina, ese día no llevaba el dinero en una bolsa, donde transportaba tickets, sino en un sobre. El empleado viajaba en el auto de la empresa y fue interceptado en un semáforo de Mendoza al 7800. Apuntándole con armas le exigieron que bajara la ventanilla. Como se resistió, los ladrones efectuaron un disparo que le rozó la cabeza. En ese momento, uno de los maleantes se subió al vehículo y le exigió "la bolsa", mientras su compañero, a través de la ventanilla, lo golpeaba en el rostro. Ante el atraco, el empleado atinó a darles el sobre en el que llevaba el dinero, pero como ellos buscaban "la bolsa" sólo se llevaron los tickets.
El segundo robo ocurrió el 16 de abril y tuvo como víctima a Víctor, otro empleado de Rosental que iba a realizar un depósito en su auto. El hombre fue abordado en el semáforo de Mendoza y Callao, y durante el atraco tuvo el caño del arma en la nuca. Esa vez los ladrones no bajaron de la moto, pero fueron igual de precisos en exigirle "el maletín" en el que llevaba el dinero, unos 20 mil pesos. Investigadores indicaron que la descripción de los ladrones coincide en ambos casos.
| |
La Ciudad
