Berlín. - El tanque estadounidense que disparó contra el hotel Palestina de Bagdad el pasado 8 de abril -matando a dos periodistas- había pedido ayuda a la aviación para bombardear el lugar donde se alojaba la prensa internacional, según un periodista del canal estatal alemán ZDF, testigo presencial de los hechos.
"El comandante del tanque reclamó el apoyo de la aviación. Sin embargo, no sabía que se trataba de un hotel", declaró el periodista alemán Ulrich Tilgner. El reportero agregó que un periodista norteamericano "embarcado" con las tropas estadounidenses le informó al comandante del tanque que el hotel estaba ocupado por los corresponsales extranjeros, por lo que el ataque aéreo fue detenido.
Fuentes norteamericanas afirmaron que los soldados aliados involucrados en el hecho se "sintieron amenazados por francotiradores iraquíes", que habían encontrado refugio en el hotel Palestina. No obstante, esta versión se contrapone con el testimonio de los periodistas que se albergaban en el lugar y fueron víctimas del ataque, que causó la muerte del camarógrafo ucraniano de la agencia Reuters, Taras Protsyuk y del español José Couso, del canal Telecinco.
Bajo fuego
En una entrevista con el semanario francés Le Nouvel Observateur publicada el sábado, el capitán del tanque Abrams que el pasado día 8 de abril abrió fuego contra el hotel Palestina, aseguró que no sabía que allí se alojaban informadores. "No, yo no recibí ninguna información de este tipo". Según la entrevista, el capitán Philip Wolford, responsable de la unidad de blindados, fue quien autorizó el fuego. "Cada uno de mis Abrams recibió al menos un tiro directo", dice el capitán, a quien se describe como alguien "calmado, franco y ponderado".
"Llevábamos ya horas en plena batalla, el fuego llegaba sin cesar de este lugar como de otros, yo devuelvo el fuego. Sin dudar, son las reglas", y añadió que "veinte minutos después supe que le habíamos dado al hotel de los periodistas". Estados Unidos aseguró en su momento que había informado a los periodistas alojados en el Palestina que su hotel se había convertido en objetivo militar. Sin embargo, los corresponsales aseguran, en su mayoría, que no habían sido advertidos de ello.