Los fiscales que investigan el crimen del joven Marcos Schenone ya tienen en su poder los resultados finales de todas las pericias que incriminan a Horacio Conzi en el asesinato, dijeron ayer fuentes del caso.
El primer peritaje de relevancia es el que confirmó que la camioneta Jeep Grand Cherokee de Conzi fue reparada para disimular el choque que tuvo contra el remise acribillado la madrugada de 16 de enero en Béccar.
Los peritos de la policía científica detectaron que las puertas del costado derecho de la 4X4 había sido masillada para tapar los raspones que sufrió cuando chocó lateralmente con el Ford Galaxy acribillado de 14 tiros.
También detectaron que una de esas puertas estaba desencuadrada a raíz de un golpe y que el vidrio de la ventanilla de la puerta delantera del acompañante había sido cambiado.
El cristal tenía distinta tonalidad de polarizado y en él no figuraba el número de chasis grabado en el resto de los vidrios del rodado. Los investigadores además encontraron dentro de la cavidad de la puerta restos de la ventanilla original, por lo que sospechan que esa vidrio se hizo añicos por el choque contra el auto o porque estalló con los disparos que desde esa camioneta se efectuaron contra el remise, según la investigación fiscal.
Además, en sus laboratorios de La Plata de la policía científica también comprobó que los restos de pintura gris hallados sobre el lateral izquierdo del remise eran de la camioneta de Conzi secuestrada.
La semana próxima se hará la misma prueba comparativa con restos de caucho encontrados en el remise que podrían corresponder a las gomas de la camioneta del dueño del complejo gastronómico Dallas-Las Olas Boulevard de Martínez.
Al margen de estos peritajes, los fiscales Mario Kohan y Hernán Collantes ya contaban con una pericia balística que determinó que tres de las cuatro balas encontradas en el lugar del crimen fueron disparadas por una pistola Piettro Beretta calibre nueve milímetros secuestrada en la casa de Conzi.
Si bien en el caso de la cuarta bala no pudo demostrarse con grado de certeza, los peritos señalaron que ese proyectil también podría haber salido de esa misma pistola.
Los fiscales también pudieron obtener, gracias a una filmación de las cámaras de seguridad del restaurante Kansas, el competidor de Dallas en la zona norte, una foto en la que se ve cómo el remise en el que viajaba Schenone era perseguido por una camioneta idéntica a la Conzi.
Aquella madrugada del 16 de enero, Marcos Schenone, de 23 años, y un amigo habían quedado en encontrarse con otros compañeros en el local Dallas de Martínez, pero llegaron 15 minutos después de la 1, horario tope para ingresar al local durante los días de semana.
El personal de seguridad apostado en la entrada no los dejó pasar, y ahí fue cuando Schenone vio a una chica (a la que ya conocía), y como sabía que ella tenía relación con los dueños, le pidió si podía hacer algo para que los dejaran ingresar.
"La chica no hizo más que decir que Schenone y su amigo venían con ella y la seguridad los dejó pasar", dijo uno de los investigadores.
De acuerdo a la hipótesis de los fiscales Kohan y Collantes y a lo declarado por testigos de identidad reservada, luego de presenciar un beso entre Schenone y la chica pretendida por él, Conzi ordenó que los dos jóvenes sean echados de su boliche.
Persecución
La indignación de Conzi fue aún mayor cuando las dos mujeres se solidarizaron con Schenone y su amigo y decidieron retirarse junto a ellos del local y abordar un remise para continuar el encuentro en otro lugar. Así fue como, de acuerdo a la reconstrucción de la fiscalía, Conzi salió detrás del remise Ford Galaxy donde iban los cuatro jóvenes y los persiguió con su camioneta Jeep Grand Cherokee por la avenida Del Libertador.
Siempre según las fuentes, a la altura de Béccar, Schenone advirtió que la 4X4 de Conzi los perseguía y preguntó: "¿Esa no es la camioneta del dueño de Dallas?", y un instante después alcanzó a afirmar: "Ese es Horacio, el dueño de Dallas".
Los sobrevivientes dijeron que el joven de 23 años dijo eso cuando la Grand Cherokee se puso a la par del remise, instantes antes de que desde su interior dispararan 14 balazos, tres de los cuales impactaron en el pecho de Schenone y terminaron con su vida. (Télam)
La Ciudad
