cartas

Mujeres que piden

En ambas peatonales y en varios puntos de la ciudad de Rosario se ven mujeres con bebés y niños de hasta aproximadamente cuatro años, sentadas en las veredas pidiendo limosna. Son mujeres de entre veinte y cincuenta años, todas aptas para el trabajo, y no tienen mutilaciones y otras discapacidades físicas ni psíquicas. El cuadro que quieren vender es un delito: "Madres pobres que piden para alimentar a sus hijos". Es una aberración, eso es lisa y llanamente explotación de bebés y menores, estando estos niños con esas mujeres de diez a doce horas por día con lluvia, calor o frío. El intendente tiene que tomar cartas en el asunto y prohibir que estas mujeres exploten impunemente a estas criaturas. Si no quieren trabajar que se queden en su casa, pero que no usen a estos niños para sus fines que es ser sanguijuelas de los ciudadanos de buena fe.
Carlos J. G. Correja