Al menos veintiuna personas murieron y otras tantas fueron gravemente heridas en una estampida registrada luego de una pelea en un club nocturno en Chicago. La corrida se produjo cuando personal de seguridad del lugar utilizó spray de pimienta para disolver la riña, provocando el pánico en la búsqueda de la salida.
Unas 1.500 personas, la mayoría veintiañeras, corrieron hacia la única escalera de salida de la discoteca Epitome, en el sur de Chicago y varios fueron pisoteados y aplastados y murieron asfixiados en la huida.
El Epitome comprende un restaurante en la planta baja y una pista de baile en el primer piso. Ambos sectores están comunicados por una escalera. Según versiones, se produjo un forcejeo entre tres mujeres por un motivo todavía sin determinar y una persona lanzarles el spray para aplacarlas, lo que desató la estampida.
Al parecer, varios clientes vomitaron, otros se retorcían y cayeron al suelo, mientras que algunos comenzaron a gritar. "Entonces estalló el pánico", dijo uno de los asistentes. Los dueños de la discoteca temieron que se tratara de un ataque con químicos y la gente intentó abandonar desesperadamente el local y se amontonó en la salida, mientras que algunas personas tropezaron por las escaleras y fueron empujadas.
"La gente se asfixiaba -declaró Teresa Hall, presente en el drama-. Yo les decía que se echaran al piso, para poder respirar mejor", agregó la testigo, quien finalmente logró refugiarse en un baño, donde permaneció casi una hora, hasta que fue rescatada por los bomberos.
Cuando los rescatistas llegaron al club hacia las 2 de la mañana, la puerta trasera del edificio estaba cerrada y debió ser derribada, perdiendo varios minutos. Este hecho no fue una casualidad: Rhonda Walker, una ex guardia de seguridad de Epitome, aseguró que la salida trasera normalmente era mantenida cerrada, para evitar que algunos clientes entren sin pagar a la discoteca.
Algunos testigos señalaron también que el personal de seguridad había bloqueado en un primer momento también la principal salida de la discoteca. "Escuchamos al disc jockey anunciar que había una pelea, y enseguida comenzó el pánico", contó otro cliente de la discoteca, Lemont James. "La gente se precipitó hacia el corredor de salida. Me encontré con gente encima y debajo de mí, otras personas estaban aplastadas contra la pared", agregó el joven.
Cuando los bomberos llegaron, encontraron ya "cuatro muertos, 19 personas con problemas cardíacos y nueve heridos graves", dijo el jefe de bomberos de Chicago, Will Knight. "Enseguida comprendimos que habría un número elevado de víctimas", agregó.
Lo creyeron muerto y lo embolsaron
Otro sobreviviente, quien prefirió no identificarse contó a un canal de televisión local cómo cuando se dirigía hacia la salida fue noqueado y permaneció inconsciente hasta que despertó en una bolsa de las usadas para transportar a los muertos.
"Corrí hacia la puerta, había mucha gente. Traté de llegar a la escalera y lo último que recuerdo es haber sido golpeado por alguien que pesaría unos 150 kilos antes de despertarme en una bolsa para muertos", relató.
Al parecer los socorristas lo consideraron muerto y lo colocaron en una de las características bolsas negras usadas al efecto. Más tarde fue tratado por una rodilla fracturada en uno de los nueve hospitales que recibieron a los heridos en la tragedia.
Según un informe oficial, 49 personas fueron trasladadas a distintos centros asistenciales, de las cuales 19 permanecían al cierre de esta edición en "condiciones críticas". (AFP)