Brasilia. - El presidente del Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, lanzó su programa "Hambre cero", recordando una frase del brasileño Josué de Castro, el autor de "Geopolítica del hambre": "La guerra y el hambre no obedecen a ninguna ley natural: son creaciones humanas". El plan es uno de los ejes de la política social de Lula y tal vez la promesa de campaña más sentida por el presidente.
El mandatario brasileño afirmó que el Brasil necesita "vencer el hambre, la miseria y la exclusión social" pero precisó: "Nuestra guerra no será para matar a nadie, sino para salvar vidas humanas".
Lula señaló que el programa, que fue lanzado en el Palacio del Planalto en presencia de ministros, legisladores y gobernadores de varios Estados brasileños, así como personalidades de la sociedad civil, no tiene inspiración meramente asistencial y precisó que incluye acciones de emergencia pero estará dirigido a atacar las causas estructurales del hambre y la miseria.
En Brasil están por debajo de la línea de la pobreza entre 48 y 56 millones de personas, que no logran alimentarse regularmente. Al asumir el poder, el pasado 1º de enero, el mandatario había dicho que el día que todos los brasileños puedan comer tres veces por día, habrá cumplido la misión de su vida.
Al firmar el decreto de creación del programa, el jefe de Estado afirmó que "la lucha contra el hambre es un paso fundamental para la superación de la miseria, de la pobreza, de la falta de oportunidades y de la desigualdad social".
60 consejeros sobre alimentos
Lula asimismo dio posesión de sus cargos a los 60 miembros del Consejo de Seguridad Alimentaria, que se encargará de administrar el plan junto con la Secretaría Nacional de Seguridad Alimentaria.
El presidente precisó que el programa "Hambre cero" es mucho más que una iniciativa de donación masiva de alimentos: "Estas donaciones de emergencia son necesarias, pero todos sabemos que no terminan con el problema".
Lula añadió que mucho más importante que neutralizar los efectos del hambre es atacar sus causas y subrayó que este programa se propone crear condiciones para que todos los brasileños puedan comer tres veces por día.
Rodeado por una platea de políticos de diversos partidos, aliados y de la oposición, el mandatario expresó que la lucha contra el hambre requiere la participación de toda la sociedad y opinó que si el problema todavía no fue resuelto, fue porque "la causa del hambre nunca tuvo la prioridad que merece ni contó con la indispensable movilización de la sociedad".
El secretario de Seguridad Alimenticia del presidente Lula, José Graziano, señaló que el interés de otros países y entidades internacionales por el programa "Hambre cero" se basa exactamente en su carácter innovador, ya que "no es un programa asistencial, sino un programa que incluye acciones de emergencia y acciones estructurales", precisó el funcionario. (DPA)