El plantel del seleccionado Sub-20 de fútbol de la Argentina se mostró eufórico al regresar ayer a Buenos Aires tras conquistar en Montevideo el campeonato sudamericano de la categoría, y hubo coincidencia en que fue "clave y decisivo" el partido clásico que le ganaron a Brasil, el que les allanó el camino al título. "El equipo tuvo un bajón cuando se perdió con Venezuela, pero se recuperó, demostró actitud y hubo una mentalización especial para ganarle a Brasil, después de ese partido, cambió el juego y la convicción", comentó Fernando Cavenaghi, el goleador del certamen juvenil con ocho conquistas y autor del gol del campeonato ante Colombia en el último encuentro. Argentina se consagró como el mejor de sudamérica en el certamen jugado en Uruguay y consiguió -antes de coronarse- una de las cuatro plazas para el Mundial de la categoría que se llevará a cabo en los Emiratos Arabes Unidos en marzo y abril próximos (los otros tres cupos fueron para Brasil, Colombia y Paraguay). El plantel campeón, encabezado por el director técnico Hugo Tocalli (sucesor en el cargo del exitoso José Néstor Pekerman), arribó ayer a la mañana en un clima de euforia típico de una conquista trascendente y fue recibido por unas cien personas en la estación aérea Jorge Newbery. El seleccionado albiceleste obtuvo su cuarto campeonato en el historial (anteriormente se había consagrado en Paraguay 1967, Chile 1997 y Argentina 1999) no sin antes sufrir, como sucedió en la inesperada derrota con Venezuela (1-0) en la fase clasificatoria que sembró algunas dudas. Esas incógnitas fueron disimuladas en parte en el encuentro con el local Uruguay (1-1) y se disiparon totalmente tras vencer por 1-0 a Brasil, luego subcampeón, en el partido más complicado de la fase final. "Ese partido fue caliente, hubo mucha pierna fuerte y lo jugamos como hinchas, por eso lo ganamos y conseguimos un triunfo clave", analizó Javier Mascherano, el volante central de River Plate. En tanto, Javier Pinola, quien se mostró cordial con la gente que se acercó a saludarlo y no se apartó ni un instante de la Copa que recibió el plantel como trofeo, coincidió en la importancia de haber vencido a Brasil y destacó que la intención del plantel es no conformarse e ir por más gloria en el Mundial. "Con Brasil es un campeonato aparte, queríamos ganarle y haberlo conseguido fue fundamental para lo que vino después, ya que ganamos confianza", indicó el ex defensor de Chacarita Juniors, actualmente en el Atlético de Madrid. Argentina retornó con la satisfacción de haber logrado el objetivo y la tranquilidad de saber que si mantiene la coherencia como equipo y subsana un par de aspectos propios de un equipo sin demasiado rodaje, puede aspirar a lo máximo en el Mundial a jugarse en Emiratos Arabes. "Antes de viajar a Uruguay sabía que llevaba buenos jugadores, pero no estaba seguro de si se podía formar con ellos un buen equipo. Los futbolistas me demostraron que sí, armaron un buen grupo y ahora debemos concentrarnos en nuestro próximo objetivo, que es el Mundial", señaló -por último- Tocalli. (Télam)
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