Año CXXXVI
 Nº 49.725
Rosario,
viernes  17 de
enero de 2003
Min 18º
Máx 25º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com






Russo busca que los juveniles sumen minutos

En el pensamiento de Miguel Angel Russo y sus colaboradores siempre navegó la idea de apostar a un equipo remendado por algunos juveniles para afrontar varios partidos amistosos en medio de la pretemporada. Por eso no debe sorprender que anoche ante Quilmes haya incluido de movida a Renzo Ruggiero, Andrés Díaz y Lucas García, y después hiciera ingresar a Diego Acoglanis, Mauro Poy, Germán Herrera y Hernán Encina cuando promediaba el partido. La estrategia original de esta decisión contempla insertarlos paulatinamente y activar un minucioso testeo que desemboque en uno de los puntos más importantes de la planificación serrana: empapar de roce y minutos en cancha a varios chicos en el exigente terreno de primera división. Algunos serán sometidos a exámenes más seguido y otros tendrán la oportunidad de mostrarse en los cotejos preparatorios que hay en carpeta para la semana que viene. Es decir cualquiera sea la variable impuesta, el técnico de Central se propuso dejar Tandil con el firme convencimiento de que tiene material para desarrollar su proyecto más allá del Clausura.
La manera de pensar de Russo tiene su costado entendible. Interpreta que la experiencia que se necesita para ponerle el pecho a cuatro meses durísimos como los que se vienen no se consigue en la góndola de los supermercados o fomentando que los pibes se sienten a mirar a sus compañeros de turno. Por eso trata de cosecharla al paso, predicando con el ejemplo y con la premisa de que los juveniles tengan un ritmo de competencia similar al de los jugadores que se presume serán titulares en el partido inaugural ante San Lorenzo por el campeonato.
"Acá todos saben lo que nos jugamos en estos meses que vienen. Los más jóvenes deben tomar plena conciencia de que si integran la lista junto al plantel profesional es porque están haciendo bien las cosas y se lo merecen. Nadie les regaló nada, ahora depende solamente de ellos demostrar que nosotros no nos equivocamos al elegirlos. Nuestra confianza en sus condiciones es plena, si llegaron hasta acá por algo debe ser". Palabras más, palabras menos, así piensa Russo cuando le sacan el tema de sus pollos promovidos.
Además desde su condición de conocedor de la política del club, Russo sabe que si Central logra el objetivo de zafar del descenso, los soldados que conforman la columna vertebral del equipo, llámense Daniel Díaz, Daniel Quinteros, Figueroa, el Mellizo y algún otro que se destape, no tendrán mucha vida futbolística en sus manos. Por eso prepara el recambio y qué mejor que usar como campo de prueba esta clase de ensayos ante rivales que también buscan la puesta a punto.


Notas relacionadas
Central, con mayoría de juveniles, empató con Quilmes
El trío inseparable
La rutina no se modificó para los que no jugaron
Messera: "No me volvía allá ni loco"
Diario La Capital todos los derechos reservados