Año CXXXVI
 Nº 49.678
Rosario,
sábado  30 de
noviembre de 2002
Min 16º
Máx 24º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





La Fundación Producir Conservando destacó la potencialidad el sector
La carrera de los cien millones
Analistas repasan las tareas pendientes para llegar a una cosecha de 100 millones de toneladas hacia 2010

La meta de alcanzar una cosecha de 100 millones de toneladas y elevar las exportaciones agroalimentarias por encima de los 16 mil millones de dólares es factible si se dan las condiciones de estabilidad, seguridad jurídica y transparencia en los mercados. Así lo señala un estudio de la Fundación Producir Conservando, que reúne a las principales firmas del sector.
El trabajo saca a la luz estimaciones del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (Usda) en las que se prevé un sostenido crecimiento del complejo sojero, el maíz, el trigo y la ganadería vacuna en Argentina. De acuerdo a estas proyecciones, la producción del complejo granario argentino se incrementaría de los 65/70 millones de toneladas de los últimos ciclos a 85/90 millones de toneladas a fines de la década, con un avance de las exportaciones (considerando materia prima y sus derivados) de 48/52 millones de toneladas a 68/70 millones. En tanto, las cifras de exportaciones ganaderas, según la misma fuente, serían superiores a las 350 mil toneladas anuales de carne.
"Manteniendo un nivel de precios similar al registrado en los últimos años, se podría inferir, a partir de las estimaciones del Usda, una mejora en el valor de las exportaciones a lo largo de la década de entre 3.500 y 4 mil millones de dólares", señala el informe de la fundación, que agrega que este crecimiento implicaría contar con un sector agroalimentario que supere las exportaciones por 16 mil millones de dólares.
Pero los analistas de la fundación que dirige Gastón Bordieu y coordina Gustavo Oliverio, estiman que "con reglas de juego estables, seguridad jurídica y mercados transparentes, la cifra de crecimiento que pronostica el Usda para el 2010 podría lograrse antes de ese plazo".
En ese sentido, recuerdan que trabajos realizados por la Asociación Argentina de Consorcios Regionales de Experimentación Agrícola (Aacrea) en el año 2001 "muestra que sólo con llevar los promedios de rendimiento nacionales de los distintos cultivos a niveles promedio de los grupos Crea se produciría un incremento de 3,3 millones de toneladas de trigo; 5,2 millones de toneladas de maíz, 920 mil toneladas adicionales de soja y 500 mil toneladas de girasol".
Además, trabajos recientes realizados por el Inta muestran un potencial de crecimiento del área agrícola de 5 millones de hectáreas en áreas extrapampeanas y dos millones de hectáreas más en el área pampeana, por lo que la superficie total bajo agricultura en el país "podría llegar en pocos años más a 31 ó 32 millones de toneladas" y con ello "la producción global de granos y oleaginosas podría alcanzar 85 millones de toneladas en poco tiempo".
"Si a ello sumamos los diferenciales de rendimiento comentados según datos de Aacrea, la cifra total de 100 millones de toneladas de producción es una meta lograble para el fin de la década", señalan.
De hecho, en los últimos 12 años la producción agropecuaria aumentó ininterrumpidamente un 66%, pasando de 41 millones de toneladas los 70 millones en la última campaña. Las exportaciones alcanzaron los 13 mil millones de dólares, llegando a representar el 51% de las exportaciones totales del país.
Si bien la producción y las exportaciones son la evidencia más representativa del crecimiento del sector, es necesario tener en cuenta que en la década del 90 el sector agroalimentario sufrió una gran transformación que lo llevó a liderar el crecimiento del país. Tomando como fuente datos de la Sagpya y la Copal, el informe de la Fundación Producir Conservando indica que las inversiones nacionales y extranjeras registradas en el sector agroalimentario argentino entre 1993 y 1998 fueron de 8.789 millones de dólares.
"También es de destacar la incidencia de estas cifras en la mano de obra ocupada, ya que en 1999 el sector agropecuario y agroindustrial ocupó laboralmente a 5,7 millones de personas, es decir un 43% de la Población Económica Activa", señala el trabajo.
Gastón Bordieu, presidente de la fundación, señaló que "si uno hace historia ve que las épocas en las que Argentina creció a ritmos destacables a nivel mundial fue cuando el país se dedicó a hacer lo que realmente sabe hacer, que es lo relacionado a la cadena agroalimentaria industrial".
Por eso, se mostró convencido de que "en un momento como el que está atravesando la Argentina, es necesario focalizarnos en lo que sabemos hacer y lograr que toda la economía crezca detrás de la dinámica que el sector agropecuario puede aportarle al país".
"Entendemos que llegar a los 100 millones de toneladas no es ninguna quimera sino que se basa en utilizar las superficies disponibles y las técnicas disponibles y sería factible que la Argentina en este década alcance ese volumen de producción paralelamente con las necesidades que el mundo va a tener en materia alimenticio", indicó.
-¿Qué les está faltando a los productores para alcanzar estas metas?
- Es necesario que tengamos esa visión de conjunto y busquemos las sinergias de cada uno de los integrantes de la cadena a los efectos de lograr un resultado global. La fundación hizo en abril una encuesta a más de 100 productores de primer nivel y entre las preguntas que se les hizo estaba cuál era el factor que ellos consideraban el que más importante que generó el crecimiento del sector en la última década. Y la respuesta diría que fue prácticamente unánime en lo que respecta a la previsibilidad de las condiciones. Esto habla de poder tener reglas claras y perdurables en el tiempo y políticas dirigidas a los efectos de poder desarrollar inversiones y poder tener reglas previsibles.
Garantizar las condiciones de competitividad y estabilidad a la cadena agroalimentaria es vital de cara a un mercado internacional que se presenta amenazante. De hecho, el informe de la fundación recuerda que en el último quinquenio se observa que "aún con producciones estables o superiores a las anteriores, la tasa de crecimiento presenta una fuerte desaceleración com respuesta a un nivel de precios internacionales deprimidos producto, entre otras cosas, de los subsidios a la producción y las exportaciones por parte de las grandes potencias.
La nueva ley agrícola norteamericana, sancionada hace poco tiempo, refuerza su actual nivel de proteccionismo destinando más de 100 mil millones de dólares para los próximos cinco años con destino al sostenimiento del ingreso de sus productores. "Por su parte, la UE, con su Política Agrícola Común, también incorpora aspectos de seguridad y calidad alimentaria, que se traducirán en nuevas barreras para el ingreso de productos a la región", señala el informe.
Una reciente publicación de la Ocde asegura que los gastos en materia de ayuda a los productores en 2001 ascendió a 311 mil millones de dólares, en su mayor parte canalizada a través de instrumentos que distorsionaron la producción y el comercio.
"Esta cifra, que es el 1,3% del PBI argentino, permitió que los ingresos de los productores de sus países asociados resultaran un 31% mayores a los internacionales", agrega el trabajo.
La fundación señala que más allá de estas variables, todas las previsiones dan cuenta de que "los principales productores-exportadores del mundo, se observa para los próximos años un fuerte posicionamiento de Argentina como proveedora de alimentos".



Proyectan un crecimiento de la producción argentina.
Ampliar Foto
Notas relacionadas
Embajadores del campo
Diario La Capital todos los derechos reservados