Los dos hermanos de la niña de seis años que el martes pasado murió por desnutrición fueron dados de alta ayer, sin embargo, permanecerán en el hospital hasta que la Justicia tucumana resuelva si los padres están en condiciones de mantenerlos, se informó oficialmente.
Pablo Gómez, de cuatro años, y su hermano, Juan Facundo, de tres meses, quienes fueron internados con una desnutrición de segundo y de primer grado, respectivamente, se encuentran compensados gracias al tratamiento que recibieron en el Hospital de Niños.
"Ya pueden ser retirados, porque Pablo hasta aumentó un kilo (llegó con siete kilos, cuando para su edad lo normal es 16 kilos), pero el problema es que si vuelven a la misma situación tendremos que internarlos nuevamente en 10 días", afirmó Juan Masaguer, titular del Sistema Provincial de Salud (Siprosa).
Los dos niños se encuentran en el hospital desde el miércoles último cuando se conoció que su hermana, María Rosa, murió víctima de una desnutrición de tercer grado sin recibir asistencia en el barrio Las Palmeras, ubicado en la periferia de la capital.
La situación de los hermanitos Gómez es estudiada por la Defensora de Menores, Adriana Romano, quien solicitó una serie de pericias médicas y psicológicas para los padres de los chicos, Pablo y Mariana Gómez, para determinar si pueden continuar al frente del cuidado de ellos. (DyN)
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