Bruselas. - La comunidad internacional respaldó la resolución del Consejo de Seguridad sobre las inspecciones de armas en Irak, aunque con matices. El principal aliado de los estadounidenses, el primer ministro de Gran Bretaña Tony Blair, afirmó que Irak todavía puede evitar ser blanco de una intervención militar, si obedece la nueva resolución de la ONU. El premier señaló que la elección es del presidente de Irak, Saddam Hussein, y advirtió: "Si Hussein desafía la voluntad de la ONU, lo desarmaremos por la fuerza. No lo dude en absoluto". Blair afirmó que el conflicto no es inevitable, pero que el desarme de Irak sí lo es. El premier británico agregó que los inspectores de armas de la ONU deben regresar a Irak y hacer su labor sin ser presionados, sin que se les impongan condiciones y sin inhibiciones. "El deber de Saddam es cooperar de manera completa y total", aseguró Blair, que sin embargo subrayó que Gran Bretaña no tiene ningún conflicto "con el pueblo iraquí". En el mismo tenor, el presidente francés, Jacques Chirac, afirmó que la nueva resolución representa "una oportunidad de desarmar a Irak de manera pacífica". En una alocución en París, Chirac aseguró que la comunidad internacional está enviando a Irak un mensaje claro y unificado de que llegó la hora de que Bagdad coopere con la ONU. Chirac afirmó ayer que su homólogo ruso, Vladimir Putin, calificó de "satisfactorio" el borrador de la resolución. Putin comunicó su postura a Chirac en una conversación telefónica, según la oficina presidencial en París, que explicó que ambos mandatarios son de la opinión de que el texto es fuerte frente a Irak y deja las puertas abiertas a una solución pacífica. En tanto, el vicecanciller ruso, Iuri Fedotov le puso la palabra oficial a la posición de su país. "Es importante que la resolución fuera adoptada en forma unánime. Esto demuestra la unidad del Consejo de Seguridad de la ONU en una cuestión tan trascendente", añadió Fedotov. Desde Berlín, el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Joschka Fischer elogió la resolución y afirmó que ve en esa medida una "clara señal" de las graves consecuencias que significaría para Bagdad no respetar esa decisión. "Alemania apoya el objetivo de la resolución, que obliga a Irak a colaborar en forma incondicional y eficaz con los inspectores en desarme", afirmó Fischer, a través de un comunicado. "La resolución es una señal clara para Bagdad. Saddam Hussein debe reconocer las graves consecuencias que significan no respetar esta resolución", advirtió. "Con una cooperación completa y sin condiciones con los inspectores, Irak tiene una posibilidad de garantizar la paz y la estabilidad en la región", sostuvo Fischer. (DPA, Télam y Reuters)
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