Recuperan más de 800 kilos de cables de cobre sustraídos

El robo de cables de las líneas de electricidad y teléfono se ha incrementado en los últimos tiempos de forma notoria. Por ello, agentes de la Brigada de Investigaciones empezaron a seguir pistas con el fin de detectar el destino del aluminio y el cobre que esos cables contenían. Así llegaron a una compraventa de Rivarola al 7700, en la zona oeste, donde secuestraron 850 kilos de ese material además de un centenar de chapas identificatorias de transformadores, distribuidores o cajas de electricidad, todo lo que había sido denunciado como robado en la localidad cordobesa de Monte Maíz. Durante el procedimiento fue apresado un hombre de 44 años, que deberá responder sobre el origen de los metales.